Las enmiendas que Navarra Suma ha presentado a los presupuestos solo plantean recortes de gasto en el ámbito del euskera. Casualidad o no, la coalición derechista apunta a Euskarabidea como el único gasto prescindible de todo el presupuesto, sin tocar ninguna otra partida de los más de 4.000 millones4.000 millones que componen el proyecto de cuentas públicas para 2021. La falta de apoyo político hará decaer todas las enmiendas en el trámite en comisión que tendrá lugar esta semana, pero ahí queda como gesto de intenciones.

Navarra Suma ha presentado un total de 260 enmiendas, 18 al texto articulado (donde se recoge la normativa) y 242 a las partidas de gasto. Alcanzan un total de 245 millones, para los que apenas plantea financiación alternativa. Prácticamente la totalidad del nuevo gasto carga al fondo de contingencia, una partida genérica en la que el Gobierno reserva fondos para posibles gastos imprevistos a lo largo del año. Pero que está dotada con apenas 21 millones, por lo que en realidad las enmiendas de Navarra Suma dispararían el déficit, y lo que las hace inviables.

No obstante, se presentan así para evidenciar la voluntad de la coalición de aumentar la inversión en distintos ámbitos en los que el Gobierno no ha querido o no ha podido presupuestar más. Pero sin asumir la cara B de la enmienda, la partida que habrá que recortar para asumir el incremento de la inversión solicitada.

CONTRA EL EUSKERA

Esta dinámica está presente en todas las enmiendas que ha presentado al coalición derechista, con una única excepción: el euskera. Las enmiendas de Navarra Suma sí plantean un recorte del gasto, pero exclusivamente en aquellas partidas de Euskarabidea. En total, la derecha propone reducir en 2,9 millones el presupuesto para la promoción del euskera, la mitad de los 6 millones de presupuesto que el Instituto Navarro del Vascuence tendrá el próximo año para el fomento de la lengua vasca.

En concreto, Navarra Suma propone reducir en 450.000 euros los fondos para la enseñanza de euskera en adultos, lo que prácticamente deja en la mitad su presupuesto. También aboga por reducir en la misma cantidad las ayudas para fomentar el euskera en los medios de comunicación (tiene 800.000 euros). Y plantea dejar a cero las partidas para la divulgación del euskera en las administraciones públicas (25.000 euros), la del fomento de la diversidad lingüística (30.000 euros), o la de la diversificación lingüística en la administración (85.000 euros). La derecha también propone recortar el convenio con Euskaltzaindía, reducir en 80.000 euros la partida para el fomento del euskera en el comercio y la empresa, y reducir en 155.000 euros los 300.000 destinados a la sensibilización y fomento del euskera. Así mismo, plantea recortar en 300.000 euros el programa para el desarrollo del euskera en el ámbito municipal. La partida está dotada con 800.000 euros.

De esta forma, de las 260 enmiendas solo hay siete que proponen reducir el gasto en partidas efectivas. De ellas seis se corresponden con Euskarabidea. La séptima afecta al Departamento de Universidad, Innovación y Transformación Digital. Plantea retirar los 30.000 euros del convenio con Udako Euskal Unibertsitatea para destinarlos a los cursos de verano de las "universidades navarras".