El joven pamplonés de 20 años, que fue capturado el fin de semana en el río Arga fue capturado el fin de semana en el río Argaen el polígono de Barañáin después de haber huido durante dos horas de la Policía Foral, tenía pendiente seis requisitorias judiciales pendientes y una orden de ingreso en prisión.

Los agentes intervinientes percibieron desde un primer momento que, dada la alocada fuga que emprendió cuando se le pidió identificarse, el individuo tenía algún asunto grave que ocultar. Y en efecto así era. Había acumulado sentencias por robo y detenciones por agresiones a un taxista y protagonizar altercados en una villavesa.

El Juzgado de lo Penal 2 de Pamplona le condenó en junio de 2021 a dos años de cárcel por haber participado junto a otros dos encausados en un robo en una cervecería de Yamaguchi. Sin embargo, no era la primera condena del individuo puesto que anteriormente ya había sido condenado a 10 meses de cárcel por robo con fuerza en un vehículo en Barañáin.

Los hechos por los que fue condenado en su momento, que le llevaron a trasladarle al centro Ilundáin, dicen que los tres investigados accedieron tras forzar la puerta de acceso y arrancaron la caja registradora. Causaron desperfectos al tirar una pantalla de ordenador al suelo, dos tablets, unos auriculares y diversa vajilla. Los acusados abandonaron el lugar siendo detenidos por las inmediaciones por agentes de la Policía Municipal. Les encontraron la caja que sustrajeron con 1.086 euros en su interior.

Al acusado le apreciaron en la condena la atenuante de toxicomanía. También en su historial figuran lesiones por agresión a taxista tras daños a villavesa en Barañáin y era la segunda vez que le habían interceptado por lo mismo.

Con semejante historial, el pasado fin de semana, cuando una patrulla de la Policía Foral acudió a identificarle cuando parecía ir de camino a un botellón se lanzó en plancha a las zarzas que anticipan la orilla del Arga en el polígono de Barañáin. Estuvo de madrugada, metido en el agua hasta el cuello, e inmóvil ante el acecho de los agentes. La persecución se prolongó dos horas. Cuando fue detenido, solo dijo que amaba su libertad y que tenía pensado irse pronto a Francia. El viaje tendrá que esperar. Primero debe ir a prisión para cumplir las penas que le quedan pendientes.