caracas - Venezuela sufre una grave crisis política que ha alcanzado una dimensión internacional. Ante las fuertes presiones a las que se ve sometido el presidente Nicolás Maduro por parte de la oposición y de varios países, el dirigente venezolano ha endurecido su política y ha ordenado cerrar las fronteras para impedir la entrada de ayuda humanitaria.

Los opositores, ayudados por miles de voluntarios, trataban ayer por todos los medios de introducir en Venezuela, procedentes de Colombia y de Brasil, camiones cargados de medicinas y comida para una población cada vez más empobrecida. Para ello pidieron la colaboración de los militares.

El ministro de Asuntos Exteriores de Venezuela, Jorge Arreaza, criticó esta iniciativa para forzar la entrada de la ayuda humanitaria y advirtió de “consecuencias” en la ONU porque este gesto viola “prácticamente todos los principios y propósitos de la Carta de la ONU”.

Este toma y daca entre fuerzas gubernamentales y oposición derivó en fuertes disturbios y cargas por parte de las fuerzas de Maduro. El Ejército venezolano usó gases lacrimógenos para dispersar a un grupo de personas que intentaban cruzar la frontera con Colombia, según testigos de la agencia Reuters.

El Parlamento venezolano, de mayoría opositora, denunció ayer que hasta las 16.00 hora local (22.00 hora peninsular española) se contabilizaban cuatro personas asesinadas y más de 20 heridos de bala en la frontera de Venezuela con Brasil. “Lo que ocurre en la frontera con Brasil no es represión común (...) Lo que ocurre en Santa Elena de Uairén es una masacre contra el pueblo indígena pemón en donde contabilizamos cuatro personas asesinadas y más de 20 heridos de bala”, dijo en rueda de prensa el diputado Juan Andrés Mejía.

“represión brutal” Por su parte, el también diputado Américo De Grazia dijo en su cuenta de Twitter que en la población fronteriza de Santa Elena de Uairén se registra una “represión brutal en las calles” y que la situación en el hospital del poblado es “grave”. “GRAVE cuanto ocurre en el hospital de #StaElenaDeUairen varios muertos, muchos heridos y las tanquetas de la GN (policía militarizada) disparan contra los ciudadanos que se encuentran en el centro asistencial”, agregó De Grazia.

Desde Caracas, la Comisión Parlamentaria para la Ayuda Humanitaria aseguró en rueda de prensa que “esta actividad está flagrantemente violando normativas internacionales del Acuerdo de Ginebra” al referirse al ataque a un centro asistencial. El médico Julio Castro, miembro de la comisión, recordó que atacar con armas de fuego un centro de salud “está claramente en contra de normas humanitarias internacionales”. Agregó que instan a las autoridades humanitarias internacionales para que se pronuncien.

Anteriormente, dos ambulancias en las que movilizaban a supuestos muertos y heridos cruzaron la frontera entre Brasil y Venezuela, donde aguardaban, del lado brasileño, dos camionetas con ayuda humanitaria para el país caribeño, tras el cierre ordenado desde el jueves por el Gobierno de Nicolás Maduro.

Maduro, por su parte, dijo ayer estar “dispuesto” a comprar a Brasil alimentos para subsanar las carencias en el país. “Todo lo que envíe la UE lo vamos a pagar, no somos mendigos de nadie”, enfatizó en el mismo discurso en el que anunció que rompe relaciones con Colombia.

El presidente venezolano dio 24 horas de plazo para que salgan del país los funcionarios colombianos. “La paciencia se agotó, no puedo seguir soportando que se preste el territorio de Colombia para una agresión contra Venezuela por eso he decidido romper todas las relaciones políticas y diplomáticas con el Gobierno fascista de Colombia”, dijo Maduro ante cientos de simpatizantes que marcharon “en defensa de la revolución”.

El Gobierno colombiano, por su parte, ordenó asimismo el regreso de los funcionarios diplomáticos y consulares presentes en Venezuela.

maduro pide protección Nicolás Maduro dijo ayer que ante cualquier circunstancia jamás se “doblegará” y pidió a los militares, a la milicia y a sus simpatizantes defenderlo si lo derrocan. “Mi vida está consagrada totalmente a la defensa de la patria, que en cualquier circunstancia jamás me doblegaré, jamás me rendiré, siempre defenderé a nuestra patria con mi vida misma si es necesario defenderla”, dijo el mandatario ante miles de simpatizantes que salieron en Caracas a “defender la revolución”. En su mensaje pidió a militares, milicia y seguidores salir en “unión cívico-militar” si algún día “le ocurre algo”.

Precisamente en las filas del Ejército se sigue produciendo un goteo de deserciones. Al menos 23 miembros de la Guardia Nacional Bolivariana de Venezuela y de la Policía de ese país desertaron ayer sábado en medio del intento de ingreso de ayuda humanitaria a su país, confirmó Migración Colombia. “A esta hora 23 miembros de las diferentes Fuerzas Armadas de Venezuela se han acercado a Migración Colombia huyendo de la dictadura de Nicolás Maduro”, dijo el despacho en un comunicado.

Según el reporte, hasta el momento han desertado “dos mujeres de la Policía Nacional Bolivariana, un miembro de las Fuerzas Especiales (FAES), un conductor de una tanqueta de la Guardia Nacional, 18 miembros de la Guardia Nacional Bolivariana, dos de ellos con sus familias, y un oficial de la Armada venezolana”. - Efe/E.P.

Ayuda. Las dos camionetas grandes con ayuda humanitaria que se encontraban entre la frontera de Brasil y Venezuela se retiraron hacia el interior del territorio brasileño por temor a posibles disturbios en la zona. En Colombia, la diputada Gaby Arellano denunció que dos camiones con ayuda fueron quemados en el lado venezolano del puente Francisco de Paula Santander, que conecta al país con Colombia.

Concierto suspendido. El concierto chavista anunciado para ayer fue suspendido según fuentes del Gobierno de Nicolás Maduro por la baja asistencia al primer recital y a los disturbios en la zona. Los organizadores indicaron que de los 40 artistas anotados para participar en el espectáculo que se desarrollaría entre el viernes y el sábado, se presentaron menos de 10.

EEUU. El asesor de seguridad nacional de la Casa Blanca, John Bolton, canceló el viaje que tenía previsto a Corea del Sur para seguir “los acontecimientos en Venezuela”, informó ayer un portavoz estadounidense.