AL BAGUZ. El campamento yihadista situado en los alrededores de Al Baguz, último reducto del grupo Estado Islámico (EI) en Siria y que fue conquistado el sábado por las milicias kurdas, continua hoy teniendo presencia de algunos civiles.

En este campamento, en el que fueron acorralados los yihadistas y sus familiares durante las últimas semanas, todavía hay mujeres, vestidas con "niqab", el velo que solo deja ver los ojos, hombres y niños, según constató un periodista de Epa, agencia participada por Efe.

Los civiles están siendo evacuados en tandas por las Fuerzas de Siria Democrática (FSD), la alianza armada encabezada por fuerzas kurdas que conquistó el último bastión del grupo yihadista.

Las milicias kurdas proclamaron este sábado la victoria definitiva frente a sus enemigos después de que el pasado 9 de febrero anunciaran el inicio de la "batalla final" contra Al Baguz, situada en el este del río Éufrates y cerca de la frontera con Irak.

El periodista de Epa vio dos cadáveres de yihadistas en el campamento, así como túneles abiertos por los terroristas y que utilizaron como refugio durante la contienda.

En las entradas de estos túneles los radicales colocaron minas antipersona, un arma que han usado durante los combates para retrasar la conquista definitiva de la zona por parte de las milicias kurdas.

En el campamento había automóviles con matrículas sirias e iraquíes, destruidos por los bombardeos o por explosiones.

Las FSD y la coalición internacional establecieron controles de seguridad por todo Al Baguz.

Durante las últimas semanas miles de yihadistas y sus familiares han salido del cerco rindiéndose ante las milicias kurdas.

Las mujeres y los niños fueron trasladados a algunos campamentos de desplazados, principalmente al de Al Hol, situado en la provincia norteña de Al Hasaka.

Los hombres sospechosos de pertenecer al grupo terrorista fueron llevados a centros de interrogación en lugares desconocidos y custodiados por las FSD.

Las milicias kurdas llevan desde el pasado mes de septiembre luchando contra los últimos reductos de los yihadistas en la provincia siria de Deir al Zur, con la ayuda de la coalición internacional, liderada por Estados Unidos.

Con la caída de Al Baguz, el control territorial del grupo terrorista, que proclamó su "califato" en Siria e Irak en el año 2014, ha legado a su fin.