PAMPLONA - Los mercados españoles están nerviosos ante la posibilidad de un pacto entre el PSOE y Podemos, y ya desde el lunes han mostrado su preferencia por que Pedro Sánchez mire a su derecha y entable conversaciones con Ciudadanos, formación más amiga de entidades bancarias y grandes empresas. La patronal cree que la mejor opción sería que Cs y el PP se abstengan en la investidura y eviten así que Sánchez pacte con Pablo Iglesias.

Sin embargo, Albert Rivera da largas a los poderes económicos y asegura que en ningún caso hará presidente a Sánchez. “Han votado los españoles, no la CEOE ni un banco”, trasladó. En una entrevista en Telecinco, el presidente de Ciudadanos, que con sus 57 escaños fue uno de los triunfadores de la noche electoral, dijo que Sánchez tiene la obligación de formar Gobierno al haber ganado los comicios, pero le instó a que busque el apoyo de Unidas Podemos y los soberanistas, ya que no tendrá el de la formación naranja.

Con este movimiento, Rivera intenta desatarse de las presiones de los mercados, recordándoles que no son ellos quienes deben elegir el color de los ejecutivos. Ayer mismo, era el presidente de la CEOE, Antonio Garamendi, quien instaba a Ciudadanos a que se abstuviera en la investidura para que Pedro Sánchez no se viera obligado a pactar con Podemos. También el Banco Santander ha dado su opinión al respecto, abogando por un Ejecutivo estable entre el PSOE y Cs. “A mí no me gusta que la economía esté en manos de Iglesias o ver a Sánchez subiendo los impuestos o pactando con los separatistas, pero votan los españoles, no los empresarios o los bancos”, les recordó Rivera.

Ciudadanos quiere tener las manos libres para llevar a buen puerto su estrategia de liderar la derecha y convertirse en el principal partido de la oposición al Gobierno de Sánchez, aprovechando el hundimiento del PP. El buen resultado del domingo ha convencido a los naranjas de que van por la senda adecuada disputando a los populares el electorado derechista. Así lo reconoció ayer Rivera, que celebró que las elecciones generales les han dado un papel “fundamental” en el Congreso que les permite erigirse en una “oposición fuerte pero con sentido de Estado” para llegar a acuerdos.

“Me comprometo a hacer una oposición distinta de la que hizo el PP con el PSOE y el PSOE con el PP, porque creo que se han roto los dos bloques, las dos Españas, y hace falta una dinámica distinta”, afirmó, abriéndose a alcanzar consensos en temas relativos la Unión Europea, la política internacional, la lucha contra el terrorismo o el medio ambiente.

acuerdos con el psoe De cualquier manera, el cordón sanitario a Sánchez a nivel estatal seguirá presente, pero los naranjas no lo amplían a todo el PSOE. Es más, están dispuestos a pactar con los socialistas en municipios y comunidades autónomas, dependiendo de lo que ocurra el 26-M, con el objetivo de frenar la influencia de Podemos y de soberanistas.

En el caso de la Comunidad de Madrid, sin embargo, Ciudadanos lo fía todo a un pacto con el PP, para que “los populistas como Podemos no gobiernen” y para que la región mantenga “una economía liberal”.