MADRID. La Mesa del Congreso ha habilitado este lunes los días 28, 29 y 30 de diciembre, jornadas que eran inhábiles a efectos parlamentarios, ante la posibilidad de que en esas fechas pudiera celebrarse el debate de investidura, aunque también está abierta la posibilidad de que se convoque para el próximo año.

Fuentes parlamentarias han explicado que la reunión celebrada por la Mesa no ha aportado ninguna pista sobre cuándo podría tener lugar el debate de investidura, pero sí ha adoptado esta decisión, de carácter meramente preventivo, por si finalmente pudiera celebrarse antes de que acabe el año, sin obstáculos reglamentarios.

Si finalmente el candidato socialista, Pedro Sánchez, se sometiera al debate en enero, incluso en su primera semana, no sería necesaria la habilitación expresa de la Mesa porque se trata de un período inhábil en el cual la Presidencia está facultada para convocar el pleno sin restricción alguna, han añadido las fuentes.

En el caso de diciembre, es un mes inhábil pero en principio no es posible la convocatoria de plenos de sábado a lunes, de acuerdo con los artículos 62.1 y 62.2, según los cuales las sesiones plenarias se celebrarán de martes a viernes, ambos inclusive, salvo acuerdo expreso de la Mesa.

No obstante, de la decisión adoptada hoy no cabe deducir, advierten las fuentes, cuál será la fecha de la investidura, pendiente de un acuerdo entre el PSOE y ERC.

La presidenta de la Cámara, Meritxell Batet, que es a quien compete en todo caso convocar el pleno de investidura, no ha aportado datos al respecto al órgano de gobierno del Congreso.

DISTRIBUCIÓN DE LOS ESCAÑOS La Mesa del Congreso ha aprobado este lunes la distribución de los escaños del hemiciclo para la legislatura recién comenzada y, según el dibujo definitivo, el líder de Vox, Santiago Abascal, se sentará en la misma fila que el presidente del PP, Pablo Casado, y dos por delante de la portavoz de Cs, Inés Arrimadas.

Vox se convirtió en las elecciones generales del 10 de noviembre en la tercera fuerza parlamentaria; en la legislatura anterior, cuando fue la quinta en número de escaños, su emplazamiento fue en el "gallinero", es decir, en las filas superiores, las más alejadas de la tribuna de oradores.

Pero en esta legislatura, como tercer partido del Congreso con 52 escaños, su ubicación cambiará ostensiblemente y Abascal se colocará en la primera fila de la zona derecha del hemiciclo, en el mismo escaño que ocupó hasta septiembre el exlíder de Cs, Albert Rivera.

Ello supone que compartirá fila con el líder del PP, Pablo Casado. Cada uno, en extremos opuestos.

Además de esta novedad, figura la de la nueva ubicación de la formación naranja que actualmente dirige una gestora. Su portavoz parlamentaria actual y previsible nueva líder, Inés Arrimadas, se emplazará dos escaños por encima de Abascal y, junto a ella, los nueve parlamentarios de su formación.

Estarán distribuidos los diez en tres filas del área derecha -la tercera, la cuarta y la quinta-, rodeados en este sector de la bancada por diputados de Vox.

Este grupo parlamentario se encontrará muy ramificado. Además del escaño de Abascal y de dos diputados más en su misma fila, se desperdigará por las filas superiores de la zona derecha y se expandirá por las de más arriba del sector contiguo, el central.

Si el PP, Vox y Cs ocupan el flanco derecho del hemiciclo, el tramo central será mucho más variado. Además del resto de parlamentarios del partido de Abascal ubicados en el "gallinero", aparecerán aquí, de abajo arriba y de derecha a izquierda, PNV, ERC, Grupo Mixto, EH Bildu y el nuevo Grupo Plural.

Por tanto, el portavoz del PNV, Aitor Esteban, estará separado de Abascal por el pasillo, igual situación que afecta al portavoz de ERC, Gabriel Rufián, y a Inés Arrimadas.

El grupo de Bildu, que se estrenará como tal esta legislatura tras dos encuadrado en el Mixto, se ubicará por encima de los diputados de Unidas Podemos y por debajo de los del Grupo Plural, pero en una fila del "gallinero".

El PSOE, partido vencedor de las elecciones, se mantiene en su zona habitual, en la izquierda del hemiciclo, al igual que el PP, pero en el sector derecho.

Como ganador de los comicios, el grupo parlamentario socialista, a través de su dirección, tomó las riendas de la negociación para la distribución de escaños, cuestión para la que se busca unanimidad. Si esta no es posible, la mayoría de la Mesa fija su criterio.

A finales de la semana pasada, el reparto estaba prácticamente ultimado.

NUEVO GRUPO PLURAL La Mesa ha aceptado asimismo la constitución del Grupo Plural que han propuesto ocho partidos minoritarios como fórmula para poder huir del Grupo Mixto, de forma que este quedará dividido en dos y ambos podrán realizar su labor parlamentaria de forma más operativa.

La decisión sigue la recomendación de los letrados de la Cámara, que no vieron obstáculo en la constitución de este nuevo grupo, el décimo que funcionará esta legislatura, una cifra nunca alcanzada hasta ahora.

Pero la decisión del órgano de gobierno no ha sido unánime, porque Vox se ha opuesto, ya que considera "un fraude de ley" el nuevo grupo. Su representante en la Mesa, Ignacio Gil Lázaro, ha acusado a sus promotores de hacer un uso "torticero" del Reglamento para lograr un estatus político y económico que no les correspondía de primera mano a través de un grupo meramente instrumental que, para colmo, algunos diputados van a abandonar en cuanto puedan.

15 DIPUTADOS DE OCHO PARTIDOS Este nuevo Grupo Plural nace con un total de 15 diputados, lo que hace innecesario cumplir cualquier otro requisito de porcentaje de voto. En concreto, estará formado por los siete de Junts (el octavo, Jaume Alonso Cuevillas, aún no ha tomado posesión al no poder acudir a la sesión constitutiva del pasado día 3); los tres de la coalición Más País-Equo-Compromís; los dos de la coalición CC-NC, y los representantes de Bloque Nacionalista Galego (BNG), Partido Regionalista de Cantabria (PRC) y Teruel Existe, uno de cada uno.

Su portavoz titular será la cabeza de lista de Junts, Laura Borràs, como formación mayoritaria, y tendrá como adjunto a Néstor Rego, del BNG. Eso sí, los cargos irán rotando mensualmente porque en la práctica el grupo funcionará como otro Mixto.

Y es que los promotores de este nuevo Grupo Parlamentario Plural vienen insistiendo en que esta alianza no es ideológica y que sólo se constituye "con criterios operativos": "El objetivo de este grupo es garantizar los derechos de los millones de electores y la operatividad del trabajo de los diputados y diputadas, así como de la cámara", remarcan.

Una vez autorizada la nueva formación parlamentaria, el Grupo Mixto recogerá al resto de diputados no adscritos en ningún otro. De entrada ahí estarán los dos diputados de la CUP, que declinaron participar en estas negociaciones, así como los dos de Unión del Pueblo Navarro (UPN) y el de Foro Asturias, que al haberse presentado a las elecciones en coalición con el PP no contaban con el visto bueno de los letrados para crear un grupo paralelo.

Eso sí, después podría haber movimientos para equilibrar ambas formaciones parlamentarias. La idea que cobra más fuerza es que al final compartan el Grupo Plural los partidos que inicialmente habían intentado aliarse bajo la denominación de Grupo Múltiple, una fórmula que no recibió el aval de la Mesa del Congreso porque sus integrantes no llegaban al 5% de los votos en toda España. Si esta idea se impone, al final el Grupo Plural lo integrarían Junts, Más País, Compromís y el BNG, en total, doce diputados.

BUSCAR EQUILIBRIO CON EL MIXTO Por su parte, Coalición Canaria, Nueva Canarias, el PRC y Teruel Existe, que parte de los que intentaron el grupo territorial que tampoco fue aceptado, volverían al Grupo Mixto para repartirse con las CUP, UPN y Foro. En total sumarían nueve diputados de siete partidos, con representaciones muy equilibradas porque ninguno tiene más de dos escaños.

Como el Reglamento establece que el cambio de grupo sólo puede hacerse al principio de cada periodo de sesiones, los partidos 'pequeños' deberán acordar cómo repartirse su representación en los debates y en las comisiones que puedan tener lugar hasta el 1 de febrero. Máxime teniendo en cuenta que una de esas citas previstas es el debate de investidura.