pamplona - El periodo de prematrícula en Infantil y Primaria finalizó ayer y lo hizo con sorpresa. Muchos centros concertados que en los últimos años se veían obligados a acudir al sorteo al recibir más solicitudes que plazas ofertadas vieron como en esta ocasión cerraban el proceso con vacantes. A falta de datos oficiales y según ha podido saber este periódico, en tres centros concertados (Liceo Monjardín, Maristas y San Fermin ikastola) la demanda de inscripciones para 1º de Infantil (3 años) superó la oferta y acudirán al sorteo que se celebrará el 14 de febrero en Educación. En esos centros hay 13 excedentes. El año pasado 70 escolares de 13 centros concertados se quedaron sin plaza en su primera opción mientras que en 2018 entraron en el bombo alumnos de diez colegios.

El descenso de la natalidad registrado en 2017, de en torno del 3,5%, parece el principal motivo de esta caída de la enseñanza concertada. Ahora bien habrá que esperar a conocer los datos globales de prematrícula para ver si este descenso se repite en la red pública o existen otras razones.

Ninguno de los centros de la asociación CECE Navarra tuvo excedentes: Miravalles-El Redín (128 solicitudes para 150 plazas), Irabia-Izaga (120 para 125), Luis Amigo (93 para 100) y San Cernin (81 para 100). Llama la atención la ausencia de sorteo en los dos últimos colegios donde en los últimos años casi siempre han tenido que recurrir al sorteo. En las ikastolas, tan solo San Fermin, con 102 peticiones para 100 plazas, tendrá que baremar cosa que no harán en Paz de Ziganda o Jaso, habituales en muchas ocasiones del sorteo.

En los centros de la patronal de Escuelas Católicas habrá sorteo en Liceo Monjardín y en Maristas pero con menos excedentes que en otros años (en el primero se quedarán en el sorteo dos alumnos fuera frente a los 14 del año pasado, y en el segundo, 9). En otros centros suele haber exceso de demanda (Sagrado Corazón, Jesuitas, Vedruna, El Huerto o Teresianas) han quedado varias vacantes o han llenado sin necesidad de sorteo. Tampoco parece que haya habido excedentes en Escolapios y Larraona, si bien no fue posible confirmar. Este periódico no pudo contactar con Anunciata, de Tudela, donde el año pasado hubo siete excedentes.