Loquillo, La Beriso e Inconscientes, el 10 de junio en la Ciudadela

El propio José María Sanz Loquillo, junto a la concejala de Cultura del Ayuntamiento de Pamplona, Maider Beloki, y el promotor del concierto, Alén Ayerdi, ofrecieron ayer en el Condestable todos los detalles del festival.

Beloki apuntó que con este concierto se cierra el ciclo actuaciones vinculadas al programa Hiriartea, en el que también figuran el festival Iruña Rock (26 y 27 de mayo) y la actuación de Kase.O (24 de junio). Estos eventos entran dentro de “la primavera musical que estamos trabajando junto con diversos promotores para revitalizar el sector y la industria musical de la ciudad”.

Por su parte, Alén Ayerdi resaltó la importancia de que fuera Loquillo quien “abriera nuestra andadura como promotores de conciertos en Pamplona. Y, ¿por qué Loquillo? Porque él siempre está para todos, apoyando las bandas emergentes, algo que nosotros también hacemos desde nuestro sello El Dromedario, sacando discos imposibles pero que son el sustento imprescindible para que empiecen a rodar los nuevos grupos”. Además, hizo hincapié en que Loquillo actuará en Pamplona a las puertas de cumplir 40 años de carrera, “tras cerrar la primera parte de la gira con un llenazo histórico en Las Ventas, que quedó registrado en CD y DVD, y habiendo recibido tres discos de diamante por haber vendido más de tres millones de discos a lo largo de su carrera. Y en Pamplona tendremos la oportunidad de ver el espectáculo de Loquillo en toda su amplitud, no constreñido en una sala”.

Loquillo comenzó su intervención diciendo que “me parece perfecto que por fin se entienda este negocio como debe ser, con las instituciones y los promotores trabajando juntos por el bien común; y que dentro de esa labor conjunta se tenga presente a las bandas emergentes y de casa. Si esto ocurriera más a menudo, todo iría bastante mejor”.

Lo que es innegable es que Loquillo y su banda viven uno de sus mejores momentos, algo que reconoció el propio artista. “Vivimos un momento muy dulce que viene del trabajo de muchos años. Y en mi caso, en concreto, tengo claro que se ha conseguido derribar un muro que existía en la música de este país, y era que a partir de los 50 años, uno estaba muerto o condenado a estar en festivales ochenteros y cosas de estas. Algo que no pasaba con la canción de autor, ya que los cantautores son longevos, y su obra, cada año que pasa, trasciende mucho más, no solo a las generaciones sino que son algo propio de la sociedad. Pero creo que ahora los artistas de rock también tenemos ese camino, como los del flamenco. Como digo, vivimos un momento muy dulce pero quiero creer que es porque se ha trabajado en buena dirección. En toda trayectoria de un artista hay etapas de éxito, de búsqueda, de travesía del desierto, así como errores y fracasos; y lo digo de forma diferente porque una cosa es un error y otra un fracaso, ya que a veces piensas que lo que estás haciendo es cojonudo y no lo es. En este sentido, 40 años dan para mucho, tanto como 24 álbumes editados y más de 3 millones discos vendidos de una música que es minoritaria en este país, como es el rock, desgraciadamente. Por otra parte, somos muy jóvenes trabajando desde una normalidad, hay que tener en cuenta que la censura desapareció en Estado español en el año 78, no como los países anglosajones, que desde el inicio podían decir lo que querían en sus letras, mientras que eso aquí está por venir, y basta como ejemplo la serie de casos que últimamente están ocurriendo, algo que a mí me pasó hace 20 años, por lo que parece ser una constante. Dentro de ese marco, aunque la situación para mí sea cojonuda, creo que son tiempos difíciles, pero los tiempos realmente difíciles son buenos para el rock and roll, aunque resulte paradójico decirlo. Como decían Ramón (Ramoncín), ‘si vuelve el pop, es que algo marcha mal’. En este sentido, hay una escena rock brillante en nuestro país, con bandas primerizas a las que, dentro de este contexto, los que estamos en un buena posición, debemos ayudar a dar salida”.

‘Salud y rock and roll’ Respecto al repertorio, y aunque Loquillo aterriza en Pamplona inmerso en la segunda parte de la gira de su último álbum, Viento del este, el público navarro se encontrará con un repertorio que mira más hacia su último directo registrado en Las Ventas, Salud y Rock and Roll. “No tocaremos tres horas y media pero sí daremos cabida a todos los fragmentos que hubo en ese concierto. Si hay algo que muchos pagarían por tener es el repertorio que yo tengo, y mi complicación es cómo lo colocas, porque te puedes quedar a mitad de camino, sobre todo cuando actúas en festivales, donde te suelen dar algo más de una hora, y eso para nosotros es como si nos levantáramos de la cama; cuando se ha terminado es cuando vamos a lavarnos los dientes. Estamos acostumbrados a conciertos largos, y de esta forma, el de Pamplona será un concierto de dos horas, mínimo. Y para eso es importante mantener una forma física potente; si alguien todavía piensa que el rock es algo parecido a ir, tomarse unas cañas y salir al escenario, es un error. Esto es algo muy profesional, es un oficio, hemos luchado para que así sea y somos muy conscientes de que cuando estamos en gira somos como un equipo de la NBA y tenemos que jugar 56 partidos, y yo tengo 56 años... Nosotros salimos siempre con esa actitud, dar lo máximo”.

Con un carrera plagada de hitos (Loquillo ha tocado con los Who, con los Rolling y tiene el récord de asistencia a un concierto en el Estado español), el próximo 4 de mayo volverá a poner una pica en Flandes actuando en el Teatro Real, algo que él ve como “una normalidad. Yo llevo haciendo teatros desde el año 93, con un espectáculo de poesía contemporánea, algo que fue muy arriesgado en el momento en que lo hice, porque te decían de todo, te insultaban... Por lo tanto, llevar el rock al teatro ahora es una normalidad, no le daría ni una sola importancia; el que se la da, todavía está en el siglo XX. Pensar que un teatro no es un lugar para el rock en el siglo XXI es un error, porque ahora la música clásica es el rock and roll”.

Precisamente, respecto al reconocimiento del rock como cultura, y teniendo en cuenta que hoy se falla el premio Príncipe de Viana, Loquillo fue tajante: “No tengo costumbre de meterme en casa ajena. Es un problema vuestro. Lo único que puedo decir es que un artista es igual en cine, en cómic, en teatro, en poesía, pintura o escultura. Yo no hago diferencias. Le han dado el Nobel a Bob Dylan, y a mí no me parece nada extraño. En el siglo XIX el rock no existía, pero ahora sí”.

En este sentido, Loquillo rememoró su filosofía, a modo de consejo para las bandas que empiezan o despuntan. “El diferencial es siempre el mismo, ¿quieres jugarte la vida o ganártela? Yo soy de la generación de o te la jugabas o era muy fácil que terminaras en el lado salvaje de la vida. Pero ahora las bandas no tienen por qué tener ese papelón, es cuestión de trabajo diario, sacrificio absoluto y de utilizar los nuevos medios, porque actualmente hay otra manera de llegar al público. Esto no es un juego, es serio, y llega un punto de tu carrera en el que debes saber jugártela, no se trata de ser malote durante un tiempo. Y es que ahora todo el mundo quiere ser estrella del rock, desde los cocineros hasta los políticos”.

Mirando al futuro Aunque está inmerso en la gira, Loquillo es un artista inquieto y siempre está manejando nuevos proyectos, de los que ayer adelantó alguno. “Nosotros no somos amigos de las subvenciones, así que trabajamos con sponsors que nos permiten hacer proyectos grandes y asumir riesgos. Así, ahora estoy trabajando en un nuevo disco sobre la poesía de Julio Martínez Mesanza, con Gabriel Sopeña, que llevará aparejada una gira. Por otro lado estoy terminando mi tercera novela y, a su vez, iniciando los fastos de lo que será mi 40 aniversario, que supongo que tendrá que ver con la reedición de todo mi catálogo, ediciones especiales, etc... Supongo que alguien querrá hacer un disco de homenaje, o de duetos... y, evidentemente, yo diré que no a casi todo. Llega un momento en la vida en el que uno tiene patente de corso porque ya ha hecho todo lo que tenía que hacer, y lo ha demostrado. Por lo tanto, sin hablar de proyectos generalistas importantes, habrá otros minoritarios que me podré permitir. Entre los proyectos con la banda de rock, el éxito y las giras, me gusta tener aire, y eso me lo dan los teatros, donde me siento muy cómodo y donde se aprende muchísimo”.

Loquillo. A punto de cumplir 40 años de carretera, y tras recibir el pasado año la medalla de oro de las Bellas Artes, llega a Pamplona cargado de clásicos que han marcado a varias generaciones. Temas como Territorios libres, La mataré (del que Sabino Méndez hace pocos días explicó nítidamente que se trata de una de las primeras canciones contra el maltrato), El rompeolas, Feo, fuerte y formal, Rock and roll actitud, El rompeolas o rock and roll star.La Beriso. Formados en Buenos Aires en 1998, el pasado mes de octubre lanzaron su sexto álbum, Pecado capital, que presentaron en diciembre ante 60.000 personas en el estadio de River Plate. El grupo gira este año por primera vez en Europa, siendo Pamplona la ciudad elegida para ofrecer su primer concierto.

Inconscientes. La banda de Iñaki Uoho Antón (Extremoduro, Platero y Tú), inmersa en una amplia gira estatal, desgranará en la Ciudadela las canciones de su segundo trabajo discográfico, Quimeras y otras realidades, antes de compartir cartel este verano con Aerosmith o Deep Purple, entre otros.

Cero a la izquierda. La banda navarra, tras cosechar un notable éxito en Zentral este mismo año, regresa a su casa para continuar defendiendo las canciones de su compacto, Campo de minas.

Jabi Izurieta. Cantautor rockero de Pamplona, ha dado un salto exponencial con su último disco, Claudia & Costello, un trabajo con raíces americanas que bebe del rock de los 70. En su presentación, agotó las entradas del Auditorio de Berriozar.

Ya a la venta. Las entradas ya se pueden adquirir en ticketmaster, al precio de 30 euros más gastos de gestión. Además, se pondrán entradas físicas a la venta en los siguientes puntos: Mesón de la Nabarreria, Infiernito Guitar Shop, Garazi, Discos Barracuda, Sante Boots, Bar Trufas, Los Fosos, K+DA (Berriozar), Black Rose (Buralda) y Basoa (Barañáin).

Recepción en el Consistorio. Tras la rueda de prensa, Loquillo fue recibido por el alcalde de Pamplona, Joseba Asiron, en el Ayuntamiento. El artista invitó al concierto al primer edil de la ciudad y ambos mantuvieron una amena charla centrada en la reucuperacion de la memoria histórica, entre otras cuestiones. Loquillo también hizo a pie parte del recorrido del encierro recibiendo las pertinentes explicaciones por parte de Alén Ayerdi.