Lejos de visibilizar el enorme problema que constituye el suicidio adolescente y ayudar a prevenirlo, a Por trece razones, el fenómeno mundial de Netflix basado en un exitoso libro, le acusan de ser cómplice del aumento de suicidios entre adolescentes registrado en Estados Unidos, que tachan de “histórico” y de “preocupantes”.

El aumento de los casos de intento de suicidio entre los jóvenes de Estados Unidos, especialmente tras la muerte de famosos de esta forma y la emisión de la serie Por trece razones, que también se puede ver en medio mundo a través de la plataforma Netflix, ha alarmado a las autoridades sanitarias, que tienen problemas para afrontar esta situación “preocupante”.

Henry Spiller, director del Centro de Envenenamiento del Hospital Infantil Nacional de Ohio, dijo a Efe que entre 2010 y 2018 hubo un aumento del 141% en los intentos de suicidio por envenenamiento en menores de entre 10 y 15 años.

“La gravedad de los intentos de envenenamiento entre adolescentes en los últimos ocho años es realmente preocupante”, indicó el experto, quien consideró que no se debe “esperar a una crisis para hablar del tema del suicidio”. Spiller señaló que los intentos de suicidio por envenenamiento “se han triplicado entre las adolescentes y las mujeres jóvenes”.

Así, entre 2000 y 2018 hubo más de 1,6 millones de intentos de suicidio por envenenamiento entre adolescentes y adultos jóvenes, de los cuales 71% (1,1 millones) eran mujeres. Varios estudios han atribuido el incremento a la influencia de los medios de comunicación y específicamente a la serie Por trece razones, producida por la cantante y actriz Selena Gómez.

La serie de Netflix, estrenada en marzo de 2017, pretendía ser una tabla de salvación para menores con problemas, pero se vio envuelta en la polémica por su temática sobre el suicidio adolescente, que, según organizaciones y psicólogos, puede ser fatal para jóvenes con depresión o ansiedad. Tras las primeras acusaciones, Netflix ya tomó medidas arropando la emisión de la serie de advertencias y mensajes de sus actores protagonistas para prevenir el suicidio animando a los chavales a que pidan ayuda.

efecto inmediato Una investigación publicada esta semana en el Diario de la Academia Americana de Psiquiatría Infantil y Adolescente les vino a dar la razón, al encontrar una relación entre la serie y un aumento del 28,9% en los índices de suicidio entre jóvenes de 10 a 17 años en el mes que siguió a su estreno.

Al comentar el informe, Lisa Horowitz, científica clínica del Instituto Nacional de Salud Mental (NIMH), que dirigió la investigación conjunta con varias universidades y hospitales, destacó la influencia de los medios, especialmente entre los jóvenes. “Los resultados de este estudio deben aumentar la conciencia de que la gente joven es particularmente vulnerable ante los medios de comunicación”, señaló Horowitz en un comentario enviado a Efe.

Niza Rodríguez, psicóloga especializada en educación familiar, manifestó a esta agencia que durante la “adolescencia -que es un período muy sensitivo e inestable- los jóvenes son mucho más susceptibles a este tipo de influencias extremas”.

Las redes sociales son “un factor detonante” que no fue sufrido de esa forma por otras generaciones y está agravando las crisis de la adolescencia, estimó. “Nunca antes como ahora la redes sociales han sido tan importantes en la vida de los adolescentes. Los padres desconocen muchos de los comentarios y agresiones que se realizan a través de las redes y solo se dan cuenta de ello algunas veces cuando ya al daño está causado”, advirtió Rodríguez.

efecto imitación Otro factor que se señala ha sido el suicidio de celebridades y la falta de una mayor capacidad de respuesta en ese momento en las líneas telefónicas de ayuda. Así, un informe de NIMH publicado también esta semana analizó los índices y causas de suicidio en los treinta días siguientes a la muerte del actor Robin Williams, quien se ahorcó el 11 de agosto de 2014.

El análisis encontró que, mientras entre 2012 y 2014 hubo una media de 113-117 muertes diarias por suicidio, el índice aumentó a 142 en promedio en el mes siguiente al fallecimiento de Williams.

Además de que ese índice no se observó ni en 2012 ni en 2013, aproximadamente dos tercios de las personas que se suicidaron tras la muerte del actor lo hicieron también por ahorcamiento. - Efe