Con ganas de libertad y de morder la vida. Así es Yerma, personaje creado por Federico García Lorca al que ayer dio vida María León en el Festival de Teatro de Olite, con La pasión de Yerma, una adaptación del texto original a cargo de Lola Blasco y con dirección de Pepa Gamboa. La obra mantiene la esencia del texto de Lorca pero da más protagonismo a algunos personajes y hace mayor hincapié en otros asuntos como el deseo y el conflicto sexual.