- Harley Quinn ha pasado de ser un personaje secundario de DC Comics a competir en popularidad con el propio Batman gracias a Margot Robbie, aunque la actriz confiesa que llegó a entrar en foros de seguidores para saber por qué gusta tanto la excéntrica villana. “Entro en foros de fans y pienso, de acuerdo... ¿qué es lo que le gusta a la gente? Y dicen oh, me encanta esto, me gusta eso otro. De lo contrario, siento que los directores, cineastas y escritores gravitan hacia diferentes aspectos del personaje”, afirma Robbie en una entrevista junto al director James Gunn, quien la convenció para meterse en el disfraz de Harley Quinn una vez más.

La actriz avanza que después de dar vida a la histriónica compañera del Joker en tres películas seguidas (Escuadrón suicida, Aves de presa, El escuadrón suicida) necesita tomarse un “descanso” porque es “demasiado”, aunque nunca ha cerrado la puerta a volver. “Lo he dicho antes, sencillamente amo a ese personaje”, afirma.

La primera película, estrenada en 2016, tuvo como protagonistas a Will Smith, Margot Robbie y Jared Leto bajo la dirección de David Ayer. Ese Escuadrón suicida original (sin El) recaudó 630 millones de euros, pero tuvo una tibia recepción por parte de críticos y fans. Incluso el propio Ayer dijo que no se identificaba con el resultado final y que no tuvo ninguna autoridad sobre el montaje. A pesar de la desastrosa acogida, el estudio Warner Bros. fue consciente del tirón que tenía el papel de Robbie y pidió como única condición que estuviera presente en la nueva versión de la cinta dirigida por James Gunn. “No había ninguna preocupación por mi parte cuando escuché el nombre de James -dice-. Sabía que no sería un guión aleatorio. A él le gustan los cómics, lo rompe cuando hace películas, quiero decir que estaba en manos realmente seguras”.

El estudio ha confiado en Gunn la segunda oportunidad para los personajes apodados como el escuadrón suicida, un alocado grupo de villanos encarcelados en una prisión de máxima seguridad que deben cumplir misiones si quieren evitar la muerte. “Normalmente no hago esto -explica Gunn-. Normalmente no cojo personajes que están tan bien definidos y Harley es un personaje que lo estaba desde su primera aparición animada, tenía una gran personalidad”.

Warner Bros. dio total libertad a Gunn para elegir el reparto de su filme, que no funciona como secuela de la cinta de 2016, pero pidió que estuviera Robbie. Por ejemplo, Will Smith no repite y debutan el luchador profesional John Cena junto a Taika Waititi e intérpretes latinos como Alice Braga, Joaquín Cosío y Juan Diego Botto. La nueva versión ha apostado por un tono mucho más cómico, que refuerza los momentos surrealistas y presenta un elenco de personajes incluso más excéntricos que la primera entrega encerrados en la prisión con la mayor tasa de mortalidad de EEUU “Es una aventura de acción arriesgada, que va en todas las direcciones, que asume riesgos y no solo en términos de fotografía, también en la forma en que la filmamos, en los giros de la trama y en contar una aventura privada de Harley durante quince minutos en medio de la película”, detalla Gunn.

Desplazada a la isla ficticia de Corto Maltés, Harley Quinn se enamora de Silvio Luna, el gobernador autoritario del país al que da vida Juan Diego Botto, actor de nacionalidad argentina y española. “Escribí esa escena entre Harley y Luna antes que el resto de la historia”, recuerda Gunn. Robbie asegura que fue una de sus partes favoritas del rodaje porque mostró una perspectiva más humana de su personaje. “Como actriz pienso constantemente en cuál fue su trauma, de dónde viene, cuál es su dolor, qué está tratando de hacer”, detalla.

Todas esas respuestas tendrán que esperar hasta que Robbie quiera volver a ser Harley Quinn.