Un partido que pudo caer de cualquier lado se acabó quedando en Burela con polémica, ya que el gol de Renato que suponía el 4-3 de los lucenses ante Aspil-Jumpers se produjo ya justo cuando sonaba la bocina del final y tampoco quedó claro que el esférico había entrado en la meta ribera. Pero los colegiados lo dieron por válido sellando la derrota del conjunto de Pato, que así ve cortada su buena racha.

Desde el primer momento se vio que Burela se estaba jugando las opciones de permanencia, apretando fuerte pero con una escuadra ribera delante que también pisaba el acelerador desde el primer compás en un encuentro de ida y vuelta. Los lucenses, tras un saque de banda de los locales, finalizaba con el balón de Quintela dentro de las mallas.

Los locales sellaron los malos momentos de los navarros apenas un minutito después, cuando el zapatazo lejano de Iago Míguez se colaba en el dos a cero, ya que la pelota se le escapaba a Gus en última instancia y acaba alojándose en la meta tudelana.Terry aprovechaba que el meta lucense estaba fuera de sitio para acortar distancias. Dos a uno.

En la segunda parte el equipo de Pato se sobreponía para igualar a dos dianas. Terry cruzaba un gran balón a la escuadra opuesta en un contragolpe y ponía las tablas en el seis de la segunda mitad. El partido fue realmente vibrante en esta segunda parte, con lucenses y navarros lanzados en pos de la meta adversaria sabedores de la importancia de los puntos. Poco después, Matamoros enviaba al travesaño, preludio de la remontada en el dos a tres en golazo de Gabriel, perfecta definición tras un gran pase de Lemine. No obstante, Javi Rodríguez igualaba a tres cuando restaban tres minutos con un golazo a la escuadra.

Final eléctrico, tremendo, en Vista Alegre. Atacaban de cinco los locales y en la última jugada del encuentro Renato desataba la locura con ese tanto polémico. Se va un encuentro importante para los de Pato.