Atlanta (EEUU) - New England Patriots y Los Angeles Rams protagonizarán esta madrugada, en el Mercedes Benz Stadium de Atlanta, la 53ª Super Bowl, la gran final del fútbol americano estadounidense, que se presenta sin un claro favorito, con cierto aroma a revancha y enfrentando a una de las mejores franquicias de la historia de este deporte con otra marcada por su juventud y pujanza.

107 años son los que acumulan Bill Belichik y Tom Brady, probablemente la pareja más exitosa de la historia de la NFL, y que iniciaron en 2002 una dinastía en el football tan odiada como respetada. El técnico, de 66 años, y el quarterback, de 41, buscan su sexto anillo de campeones en las 19 temporadas que llevan juntos, en las que nadie ha estado tantas veces en el partido decisivo como ellos (8).

Enfrente, los 57 años que reúnen Sean McVay y Jared Goff, un dúo dispuesto a hacer hincar de nuevo la rodilla a los Pats como hicieran el año pasado las Águilas de Filadelfia (41-33). El entrenador de los Carneros ha demostrado su capacidad con tan sólo 33 años y ha llevado a la franquicia a su cuarta presencia en la Super Bowl, la primera desde que se marchó de St. Louis, de la mano de un mariscal de campo que ha ratificado por fin las expectativas que había depositadas sobre él.

Los Patriots, campeones de la Conferencia Americana, están ante una tentativa de alcanzar en el palmarés a Pittsburgh Steelers con su sexto trofeo Vince Lombardi, el tercero en cinco años, y su mayor baza reside en su mayor experiencia ante unos Rams ganadores de la Nacional y que han mostrado muy buen nivel, tanto en la temporada como en la postemporada.

Ambos sacaron su billete para la capital de Georgia como visitantes, algo que no sucedía desde 2013, y lo hicieron en el tiempo suplementario ante Kansas City Chiefs (31-38) y New Orleans Saints (23-26). Estos dos partidos dejaron claro que Brady sigue siendo un maestro en los momentos clave, con un drive sensacional en la prórroga ante los Chiefs, y que la defensiva angelina tiene tanto poderío como su ofensiva para recuperarse de un 13-0 inicial.

El equipo de Belichik volvió a demostrar una temporada más que son la gran franquicia del siglo XXI, pese a un timorato comienzo que hizo saltar las alarmas. Pero a la hora de la verdad, los Patriots fueron ese equipo veterano capaz de gestionar bien todo tipo de situaciones y dispuestos a que no haya revancha de los Rams, ante los que iniciaron precisamente su era dominadora en 2002, imponiéndose por 20-17.

El ataque de los campeones de la Conferencia Americana gira en torno a Brady y a su conexión con James White, Sony Michel, Rob Gronkowski y Julian Edelman. McVay lo sabe y se esmerará en diseñar un plan para que el 12 no pueda jugar con comodidad e intentar derribarle por primera vez en toda la postemporada. El evento podrá seguirse a partir de las 00.00 horas en directo en #Vamos de Movistar. - E.P.