pamplona - La plantilla de ICF Faurecia decidió ayer comenzar una huelga indefinida después de que la multinacional no haya aceptado por el momento la petición de que un interlocutor directo de la compañía “se siente a negociar” con el comité. La parte social, compuesta por cuatro delegados de CCOO, dos de ELA, dos de LAB y uno de UGT, acudió ayer a la reunión convocada por la empresa a las 11.00 horas, pero desde las seis de la mañana los trabajadores y trabajadoras se citaron en la factoría de Burlada para secundar su jornada de paro. La tensión entre los presentes creció cuando hacia las once menos cinco de la mañana llegaron a las instalaciones los representantes del despacho de abogados Garrigues, los interlocutores de la compañía para negociar “el cese de la actividad de la planta”, y de la consultora madrileña CMC. Tanto a su entrada como a su salida, la plantilla les cortó el paso de forma momentánea para mostrar su rechazo a la clausura. Portaron una pancarta, silbatos, camisetas y pegatinas reivindicativas para protestar.
En la reunión, los abogados de Garrigues insistieron en que su cometido consiste en negociar los despidos por el cierre de la planta, que lo justificaron por las pérdidas acumuladas en los tres últimos años, aunque se les olvidó comentar que en la última década el fabricante de correderas de asientos ha ganado 15 millones, incluido el pasivo de esos tres ejercicios. Entregada la documentación a la representación social, ayer comenzó el periodo de consultas de un mes para negociar el ERE de extinción de los 190 contratos. La próxima reunión se ha fijado para el miércoles 18, a las 11.00. Desde el comité repitieron que no reconocían a este despacho de abogados y que exigieron como negociador a “un representante de Faurecia-Lear y un plan de viabilidad”.
en breve
“Es una deslocalización”. El comité denunció que los abogados enseñaron unas previsiones negativas para 2015 y 2016 basadas en la caída de ingresos por la pérdida de proyectos y en el mantenimiento de los gastos fijos, entre ellos, el de personal. “Lógico que suceda esto si nos quitan el trabajo y lo llevan a otras plantas. Se trata de una deslocalización”, denunciaron.
Manifestación el día 21. El sábado 21 han convocado una marcha a las 17.00 horas desde la antigua estación de autobuses.