pamplona - El Tribunal Supremo ha puesto fin a una de las tallas judiciales más largas de los últimos años. Y lo ha hecho dando la razón a los dos trabajadores de la planta de ZF-TRW despedidos en el transcurso de un ERE por cuestiones de salud, explicó recientemente el sindicato CGT, presente en todo el proceso. "Los 2 trabajadores serán readmitidos, y por otra parte este caso crea jurisprudencia a nivel nacional", explicó el sindicato.

A principios de 2019 ya el Tribunal Superior de Navarra sobre dos compañeros despedidos había reconocido la nulidad del despido de los dos trabajadores. En su sentencia, entendía que "al estar considerados trabajadores especialmente sensibles por sus patologías crónicas, el despido vulneraba un derecho fundamental y se incurrió en una discriminación indirecta".

La empresa recurrió esta decisión al Tribunal Supremo (Madrid) y "a pesar de que la sentencia del TSJN de Navarra le obligaba a readmitir a los trabajadores, decidió no dejarles entrar a trabajar, aun sabiendo que debía pagarles durante todo este tiempo", explicó CGT. El Tribunal Supremo, sin embargo, ha desestimado el recurso y ha ratificado la sentencia, por lo que los trabajadores tendrán la opción de incorporarse a la empresa, dedicada a la fabricación de direcciones para automoción.

"Que se haya logrado crear jurisprudencia a nivel estatal, es un paso muy importante ya que a partir de ahora cualquier trabajador que sufra una cuestión de esta índole (un despido por bajas debidas a una enfermedad crónica) cuenta de partida con un posicionamiento favorable del Tribunal Supremo", explicaba CGT, quien entiende que la sentencia debe ser también un paso para anular el controvertido artículo 52 del Estatuto de los Trabajadores en "el que se regula el despido por bajas o por inaptitud sobrevenida como es el caso reciente de varios trabajadores de Volkswagen Navarra".

Para CGT "se hace justicia con estos trabajadores, aunque no así con el resto, que fueron igualmente injustamente despedidos, en un expediente fraudulento". El sindicato recuerda que, tras el ERE con 101 afectados, se contrató a 200 eventuales, para despedir posteriormente a los 22 trabajadores fijos que faltaban por extinguir sus contratos.