- La Confederación de Empresarios de Navarra (CEN) manifestó ayer la importancia de agilizar los trámites para aprobar un expediente de regulación de empleo de suspensión temporal (ERTE) y mitigar así las consecuencias negativas del coronavirus en la actividad de cualquier empresa. El presidente de la patronal navarra, José Antonio Sarría, trasladó esta y otras peticiones al consejero de Desarrollo Económico y Empresarial, Manu Ayerdi, durante la reunión mantenida ayer por la tarde, a la que asistieron otros agentes.

Sarría remarcó que esta pandemia puede abordarse desde el punto de vista de la salud, económico y laboral. El presidente de los empresarios recalcó que su intervención se centró en estos dos últimos ámbitos. El tema laboral ocupó gran parte de la reunión, y aunque muchas de las cuestiones dependen del Estado, “el Gobierno de Navarra puede actuar como un interlocutor para ayudar a que se activen estas propuestas”, dijo José Antonio Sarría.

Manu Ayerdi escuchó a los asistentes y apuntó los diferentes planteamientos. La CEN reconoció que el coronavirus puede provocar la necesidad de aprobar ERTEs “por fuerza mayor”, y que para utilizarlos sería necesario “acelerar el procedimiento antes de su aplicación”. Ahora se exige un periodo de consultas de 15 días, “tiempo que debería acortarse”, dijo, porque las consecuencias del coronavirus pueden perjudicar a la actividad de una compañía con celeridad. Además, expuso que a los trabajadores regulados que cobren prestación por paro por esta pandemia, el SEPE no les descuente el desempleo de su bolsa para evitar agravios en situaciones futuras, como un despido. Sin embargo, Sarría remarcó que las compañías deben impulsar primero medidas de flexibilidad internas ante una reducción de la actividad y posteriormente usar el ERTE en el caso de que fuera necesario.

Ante el cierre de los colegios, el presidente de la patronal también sugirió que las compañías deben utilizar su flexibilidad interna para favorecer la conciliación.

Exigió “agilizar las pruebas para detectar a los trabajadores con coronavirus, porque cuanto antes se confirme el diagnóstico, antes podrá actuar la empresa”. En el capítulo económico, Sarría advirtió de “la falta de tesorería que van a padecer pequeñas empresas y negocios, para lo que será necesario retrasar determinados pagos a la Administración local o central vía impuestos, etc” y contemplar “la posibilidad del uso de créditos blandos”.