PAMPLONA - El empleo comienza a reaccionar en Navarra. Un julio sin San Fermín y sin apenas turismo dejó la mejor cifra de creación de empleo del lo que va de siglo, con 1.835 cotizantes más y el segundo descenso consecutivo del paro, que se mantiene, al margen de los Expedientes de Regulación de Empleo todavía vivos, en 40.048 personas desempleadas. La cifra más alta en esta época del año desde 2016.

Los estragos causados por la epidemia y el confinamiento son, en cualquier caso, profundos. Desde mayo, cuando la actividad inició un suave regreso, Navarra apenas ha recuperado el 30% del empleo que se destruyó entre el 15 de marzo y el 30 de abril. En el último mes han sido la hostelería, la industria alimentaria y las actividades sanitarias las que han impulsado la contratación y las que han logrado que el paro se reduzca en 416 personas.

Esta es la foto del momento, la de una economía que, sin apenas estímulos externos, que trata de recomponerse tras el shock de la primavera. Porque la comparación con el mismo mes del año pasado arroja una perspectiva aún más cruel del impacto. En apenas 45 días se perdió todo el empleo creado en los dos últimos años. Y, por ello, hoy hay 5.802 personas menos trabajando que hace un año, un descenso del 2% que contrasta con el crecimiento, entonces también cercano al 2% anual, que se registraba antes de la epidemia. En toda España, la caída supera el 3,8%, con territorios que han vivido un auténtico terremoto.

El Departamento de Derechos Sociales valoraba los datos “como positivos, toda vez que desciende el desempleo por segundo mes consecutivo y se vuelve a generar empleo”. Sin embargo, y ante la posibilidad de que en agosto mismo se trunque la creación de empleo, prefería ser cauteloso, “a pesar de los signos que indican una ligera reactivación, un cambio de tendencia”. “Lo cierto -apuntaba desde el Departamento- es que la evolución de la propia pandemia y el control de los diversos rebrotes condicionará la extensión e intensidad de la recuperación socioeconómica”.

SUBIDÓN DEL PARO EN UN AÑO

En el mismo sentido, el Gobierno recordaba que el leve descenso del paro vivido en julio contrasta con lo sucedido en los últimos años, concretamente desde 2017, cuando el desempleo se había incrementado respecto a junio. “La situación es muy diferente y hay que tener en cuenta la intensa y rápida destrucción de empleo de los últimos meses”. Así, respecto a las cifras de paro de febrero y a pesar de los descensos de junio y julio, se ha dado un aumento del desempleo de un 18% (casi 6.073 personas paradas más). Con respecto a julio de 2019, se produce un aumento del paro registrado del 29,2%, 9.046 personas más. Navarra es, tras la muy turística Baleares y tras Catalunya, la tercera comunidad en la que más se incrementa el desempleo en el último año.

CRISIS SEVERA

“El empleo se está recuperando”, explicaban ayer desde el servicio de estudios de Cámara Navarra, que advertía de que “ cerca de 25.000 personas están en ERTE y que no son contabilizados como parados, pero sí puede suponer un incremento del desempleo en los próximos meses si la actividad no se recupera según lo esperado”.

Nadie es capaz de aventurar qué sucederá a partir de septiembre. Pedro Sánchez, alargaba ayer hasta 2023 la recuperación económica total y el Gobierno de Navarra reconocía ayer entre líneas, en el informe mensual que acompaña a los datos del desempleo, que el verano se quedará muy lejos de compensar el empleo destruido. “La reactivación se está viendo muy afectada por la gran incertidumbre que supone la evolución de esta pandemia de dimensiones todavía impredecibles agudizada por los continuos rebrote” que la crisis sanitaria presenta. El verano no está suponiendo el descanso que se esperaba y la percepción de un futuro incierto a la vuelta del curso escolar se acentúa conforme las medidas de contención regresan, aunque en este caso sean más localizadas y menos restrictivas. Pero los efectos en el empleo de éstas no se harán esperar”.

APUNTE

Por sexo. La variación mensual del desempleo por sexo corrobora el desequilibrio de los últimos meses. Así, en un mes el número de desempleadas desciende un 0,9% frente al descenso del -1,2% en el caso de los hombres desempleados. En estos momentos, según la distribución del paro por sexo, el 57,3% de las personas paradas son mujeres frente al 42,7% de hombres.

Por edad. Uno de los colectivos más afectados por la crisis es el de las personas jóvenes. En un mes se ha dado un aumento personas de menos de 25 años paradas del 1,4% mientras que en resto de intervalos ser ha reducido.

“Hay que aplicar medidas y priorizar las que van destinadas a la creación de empleo”

CÁMARA DE COMERCIO

“El empleo que se crea es de una absoluta precariedad, con un 93% de temporalidad”

UGT