El grupo Volkswagen, con fuerte presencia en Navarra, ha lanzado una seria advertencia al Gobierno de Pedro Sánchez. "Nadie compra la Biblia donde están prohibidas". Lo ha dicho Francisco Pérez Botello, presidente de Volkswagen España, quien considera que del ejecutivo central recibe buenas palabras, pero ninguna acción concreta.

El directivo del área comercial ha sido muy claro durante su intervención en un acto organizado por la marca. Y lo ha hecho precisamente en un momento clave, en el que se debate acerca de los fondos europeos y las inversiones necesarias para electrificar el transporte. "Al Gobierno le importa muy poco la industria del automóvil".

Volkswagen Navarra, donde trabajan más de 5.000 personas de forma directa y de cuya actividad dependen prácticamente otros tantos empleos, compite en estos momentos por los proyectos eléctricos del grupo, que todavía no ha hecho público donde fabricará el equivalente eléctrico del Polo y el T-Cross, los dos modelos que fabrica en el actualidad.

Francisco Pérez Botello/Volkswagen España

Pérez Botello ha recordado que el automóvil está comprometido con los objetivos de descarbonización del Gobierno, pero no puede compartir determinados elementos de la hoja de ruta que ponen en riesgo no solo la consecución de esos objetivos, sino el futuro de la industria del automóvil, que está inmersa en el mayor proceso de transformación de su historia.

Asimismo, ha incidido en el efecto tractor que la automoción tiene en la economía por su vínculo directo con otros sectores de actividad. "No podemos permitirnos poner en riesgo nuestra industria. Cuanto antes se recupere el sector del automóvil, antes se recuperará la economía española", ha dicho.

Francisco Pérez Botello ha advertido al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, sobre el negativo mensaje que está lanzando España a la industria internacional del motor con la decisión de no actualizar el impuesto de matriculación. "La no actualización del impuesto es decir me da igual lo que pase con el automóvil", ha criticado el directivo quien ha recordado que España es el único país fabricante de coches que no ha actualizado este impuesto con la llegada del WLTP. "Fuera no se entiende".

De hecho, Anfac, la patronal del sector, ya propuso hace un año eliminar el Impuesto de Matriculación y crear una nueva figura impositiva que pagarían todos los vehículos en función del volumen de sus emisiones. Junto a ello, los coches eléctricos no pagarían IVA, como ya sucede en otros países europeos, y los híbridos enchufables se podrían acoger al tipo reducido. Un año y una pandemia después, el planteamiento no ha tenido respuesta por parte del Gobierno.