ELA, con 32 delegados en las últimas elecciones en 2019, se presenta a estos comicios como sindicato de contrapoder que defiende “el autogobierno, el derecho a negociar y a decidir en Navarra las condiciones laborales”. Considera que la huelga del 15 de febrero “desmontó las mentiras del Ejecutivo" y mostró "el camino que se debe seguir”; e insiste en que la movilización resulta clave para alcanzar las peticiones sindicales.

Cerrar la puerta a la privatización

Esta central apuesta por consolidar el empleo del personal temporal en el sector público y cerrar la puerta a la privatización. Y denuncia que “Navarra sigue funcionando como sucursal de Madrid a la hora de afianzar los puestos de trabajo en el sector público”.

“La parcialidad, temporalidad y cuidados recaen en las mujeres”

Aboga por la carrera profesional para todo el personal y por recuperar el poder adquisitivo. Propone modificar el plan de igualdad, ya que no recoge medidas concretas para adecuar a cada ámbito y corregir así la brecha de género. ELA reitera que “la parcialidad, temporalidad y cuidados recaen en las mujeres”, una situación que debe cambiar por medio de propuestas efectivas.

Otras cuestiones relevantes

Pide más inversión para prevenir riesgos laborales; y solicita el contrato relevo para rejuvenecer plantilla, reformar el estatuto del personal público, e implantar el teletrabajo pero si asume la Administración su parte de responsabilidad en esta materia.