La salud mental se ha convertido en uno de los principales problemas de la sociedad. Afecta en todos los ámbitos, y también en el laboral, al haberse convertido en la segunda causa de bajas laborales en Navarra. Su incidencia en las empresas prácticamente se ha duplicado en la última década, tanto debido a su volumen como al elevado número de días de baja que suponen. Si la media del conjunto de las incapacidades temporales ronda los 31 días de baja, en el caso de la salud mental esta cifra se triplica hasta superar los 90.
Se trata de un problema cada vez más transversal, como muestran los datos que ofreció Mutua Navarra durante una jornada en Cámara Navarra celebrada este miércoles. Si bien la incidencia sigue siendo superior entre las mujeres, estas bajas cada vez son más frecuentes entre los hombres. Y, en los últimos años, los jóvenes se han convertido en uno de los colectivos más afectados, con un elevadísimo crecimiento en el número.
Joan Piñoi, director de la fundación Salud y Persona advirtió de que en 2030 la salud mental será la primera causa de discapacidad y baja, ha destacado que algunas empresas han incorporado ya servicios de atención psicológica telefónica 24 horas 365 días al año y citó también algunos de los desencadenantes de los problemas de salud mental y emocional que desembocan en procesos de baja laboral cada vez más frecuentes.
Cuáles son las causas
Así, entre los factores citados, de mayor a menor impacto, se encuentran la muerte de hijos, cónyuges y padres; las muertes y suicidios de compañeros, los accidentes laborales, y los diagnósticos de enfermedades graves. En un escalón inferior se encontrarían los divorcios, despidos, acosos (cada vez en mayor medida a hijos) y agresiones; en otro nivel afectan también las reducciones de plantilla, traslados, cambios de calendarios y la presión por resultados; y en un menor nivel de impacto, pero también relevante, los matrimonios, vacaciones y reconciliaciones matrimoniales.
Otros estudios apuntan asimismo al estilo de vida, como un factor no desencadenante, pero que sí puede hacer más probable sufrir este tipo de problemas. De este modo se cita a la dieta y a la nutrición: no ingerir nutrientes esenciales puede afectar negativamente el cerebro y la salud mental; a la falta de actividad física o al abuso en el consumo de sustancias estupefacientes.