El Volatín recuerda la denuncia de Policía Foral y se viste de interrogante
Luis Casado recordó la "pataleta" de los denunciantes en un acto que contó con el tudelano Alfondo Verdoy como pregonero
tudela - En respuesta a quienes interpretaron que el traje de El Volatín de 2013 y las palabras del pregonero Pepe Zardoya eran un atentado contra la Policía Foral y un delito de "injurias", ayer el pelele tudelano se vistió de interrogante para que cada uno diera la interpretación que quisiera. Entre protesta y contestación, El Volatín ardió ayer más pronto de lo habitual, generó una gran humareda en el interior de la Casa del Reloj y hasta perdió una pierna en los zarandeos de la brigada. Como acto previo, la figuración del ajusticiamiento de Judas tuvo en el profesor, escritor y hombre de la cultura tudelana, Alfonso Verdoy, a su pregonero, una persona a la que presentó Zardoya como "hombre íntegro, honesto y generoso" y que "es difícil encontrar otra que haya abarcado tantos ámbitos con su intensidad y calidad". No en vano, Verdoy, madrileño de nacimiento pero tudelano de corazón y adopción, ha sido uno de los pocos pregoneros recibido con aplausos por el público.
En su tercer año como modista de El Volatín, después de que le cediera el testigo María Teresa Garijo en 2011, Ana Gil Jimeno decidió eliminar polémicas por el traje de la figura de Judas. En 2013, la Policía Foral denunció que llevara un uniforme de este cuerpo (por el tema de eliminar la boina), y que en el pregón se hablara de la corrupción y del "traidor". De esa manera ayer se vistió al pelele con un traje negro con capucha y dos grandes interrogantes, uno a cada lado, para que cada espectador diera la interpretación que quisiera y quedara patente la protesta por la polémica del año pasado. No en vano el anterior pregonero, el abogado Pepe Zardoya, señaló antes de dar paso a Verdoy "ahora que el oficio de pregonero puede convertirse en una tarea de riesgo tengo el privilegio de presentar a Alfonso Verdoy", ya que la denuncia, en parte, se dirigió contra él.
discursos En su discurso, Verdoy hizo referencia al humor de la Ribera con el que "rematamos las situaciones duras, porque estamos seguros de superarlas y por eso el Volatín nos cae simpático, pues de alguna manera nos representa también a nosotros. No es una burla cruel, ni un acto sádico, sino una parodia divertida que quita los tintes de tragedia".
En el acto de entrega del cabezudo Tudelano a la comparsa de Cabanillas, tanto el presidente de la Orden del Volatín, Rafael Remírez de Ganuza, como el alcalde, Luis Casado, e incluso el presidente del parlamento, Alberto Catalán, hicieron referencia a la polémica de 2013, criticando a quienes denunciaron a la Orden de El Volatín, algo que, según Casado "quedará en pataleta de unos pocos que no han sabido entender la tradición y que pusieron un orgullo desmedido por encima de cualquier cosa". Remírez de Ganuza señaló que "en 2013 alguien le dio unas vuelticas de más al Volatín y le salió respondón pero quedó retratado. El juez ya dijo que tampoco se puede calificar como injuria lo que se critica en el Carnaval de Cádiz o en las Fallas de Valencia. Al final un despropósito que deja a cada uno en su sitio". A todo esto Catalán suscribió todo lo anterior y añadió "que nos dejen tranquilos disfrutar de la fiesta".
La Orden del Volatín entregó también un reconocimiento a Tejidos Castillo por haber donado las telas para El Volatín durante más de 20 años.