pamplona - La legislatura entró ayer en un camino no transitado hasta la fecha en el Ayuntamiento de Pamplona, tras constatarse que el acuerdo alcanzado entre las 3 formaciones de la oposición va en su serio y que la mayoría que suman sus 14 concejales va a condicionar el presupuesto y parte de las inversiones previstas por Navarra Suma para este ejercicio.

La cuantía de las enmiendas aprobadas ayer por EH Bildu, PSN y Geroa Bai no es muy elevada, 1 millón de euros, pero el acuerdo tiene un alcance mayor ya que las 3 formaciones garantizaron la financiación de todos los proyectos que pactaron en 2019 y las inversiones procedentes de la legislatura pasada. Si se mantiene el panorama actual, y no tiene pinta de que suceda lo contrario, el mayor impacto llegará en la próxima modificación presupuestaria relativa a las inversiones financieramente sostenibles, con un importe de unos 8 millones de euros, donde las fuerzas de progreso podrán marcar el destino de las partidas y proyectos pendientes.

El alcalde Enrique Maya se encontró ayer ante el peor escenario posible. Unos presupuestos heredados del cuatripartito después de que no consiguiera aprobar los suyos y un acuerdo entre las formaciones de la oposición que él no ha sido capaz de alcanzar en estos 8 meses de mandato, como se lo recordaron ayer los portavoces de la oposición.

Por el contrario, la acción de gobierno de Navarra Suma ha propiciado que las relaciones entre los grupos de la oposición se hayan intensificado. Excepto en símbolos y política lingüística, donde la coalición de la derecha contó con el apoyo socialista, las coincidencias en la inmensa mayoría de los asuntos municipales son totales entre Bildu, PSN y Geroa Bai y parece que las estratégicas también.

Ayer se pudo comprobar en el Pleno, donde Joseba Asiron, Maite Esporrín y Javier Leoz pusieron en valor el acuerdo alcanzado y avisaron a Navarra Suma que si continúa por la misma senda de la unilateralidad el resultado será el mismo en las próximas modificaciones presupuestarias que presente.

Las enmiendas aprobadas por las formaciones progresistas incluyen nuevas partidas para barrios, cultura, movilidad, educación, comercio y turismo. Se aprobarán 3 inversiones para impulsar nuevos parkings disuasorios e intermodales en Rochapea y Etxabakoitz (Grupo Urdánoz), dotado con 130.000 €; el proyecto de reurbanización y peatonalización de San Francisco (50.000 €) y la redacción del proyecto de la segunda fase del Plan de Amabilización, y una partida de 20.000 € para un bosque en Lezkairu. Para Escuelas Infantiles, el acuerdo contempla una partida de 200.000 € para poner en marcha las obras del futuro centro de Lezkairu. Asimismo, se prevé aprobar una partida de 50.000 € para iluminación y señalización de la sala de enlaces de la Sala de Armas de Ciudadela.

Para los barrios, el acuerdo incluye partidas para rehabilitar aceras en Mendillorri (100.000 €) e impulsar las acciones ya previstas en Milagrosa-Arrosadia, Azpilagaña y Santa María La Real dentro del proyecto Edusi (100.000 €). También se prevé una partida de 150.000 € para la construcción de un campo de Softball, y 50.000€ para el proyecto de mejora de la cubierta de la pista deportiva en el patio del colegio Buztintxuri. Finalmente, el acuerdo contempla partidas para el desarrollo del Plan de Comercio (60.000 €) y del Plan de Turismo (40.000).

A estas acciones hay que incluir las que incorporaba la propuesta del equipo de Gobierno, que fue aprobada por unanimidad, con proyectos ya comprometidos de antes. Contempla la reurbanización de San Jorge (850.000 euros), de Doctor Juaristi (431.000 euros) y de María Auxiliadora (300.000 euros); la reforma de las viviendas de San Pedro (780.000), e inversiones en la Casa de la Mujeres (286.000 euros), en el skatepark de Antoniutti (168.000 euros); en el campo de fútbol de San Jorge (171.000), el edificio Carbonilla (107.000), en aceras del grupo Urdánoz (137.500 euros), el centro de interpretación de las murallas ubicado en el Fortín de San Bartolomé, para el que se prevén 89.600 euros, o la grada para el campo de fútbol de Lezkairu, 125.000 euros.

debate La primera en intervenir fue María Echávarri, concejala delegada de Servicios Generales, que no pudo disimular el profundo enfado que ha generado en el equipo de Gobierno el acuerdo de la oposición, que lo calificó de "teatro". La representante de Navarra Suma atacó a los socialistas a quienes acusó de "blanquear a Bildu" y lanzó un mensaje apocalíptico por el efecto de las enmiendas aprobadas. En su opinión, que las modificaciones se hayan gestionado tras recortar las partidas de Animsa y para semáforos tendrá graves consecuencias presupuestarias.

"No han pensado en la ciudad. Es un acuerdo con motivos políticos para escenificar que hay dos bloques en el Ayuntamiento. El objetivo que buscan está alejado de los intereses de Pamplona".

Por parte de EH Bildu intervino Joseba Asiron, que destacó la importancia del acuerdo alcanzado entre las formaciones de progreso, en contraposición a la falta de consensos con el equipo de Gobierno. "Sabiendo que no tenía mayoría se tenía que haber ocupado de ampliar los consensos. No lo ha hecho y encima se ha dedicado a gobernar como si tuviera mayoría. Creo que le están asesorando mal".

Asiron reprochó a Navarra Suma por no haber creado un clima propicio para los consensos y que se haya basado en medidas unilaterales y ocurrencias. "Lo que no ha hecho el equipo de Gobierno lo hemos hecho los grupos de la oposición, en un ejercicio de responsabilidad. ¿O es que se piensa que es más fácil para ustedes que para nosotros sentarse a negociar con el PSN?

Por parte del grupo socialista, Maite Esporrín dijo que el discurso de Echávarri había sido "tremendo" por calificar la acción de los partidos de la oposición "de teatro" e indicó que los tres partidos de la oposición "constatan una realidad, que el equipo de gobierno está en minoría. Les falta humildad y le sobra arrogancia". Defendió la modificación presupuestaria, que mantiene la partida para personal de Animsa -"para evitar que haya un ERE y se despida a trabajadores"- y señaló que los cambios motivados buscan favorecer "el área de deportes, cultura, educación o mirar a los barrios desfavorecidos de la ciudad".

Sobre las críticas a las enmiendas, Esporrín consideró que "poner ahora cinco grupos de semáforos no es urgente" y pidió al equipo de Gobierno que empiece la ejecución de los proyectos si quiere tener algún fin mejor para la negociación de las próximas inversiones "porque Pamplona se lo merece".

Javier Leoz (Geroa Bai) insistió en la falta de acuerdos con el equipo de Gobierno y criticó la actitud mantenida en estos 8 meses. "Desde que fue elegido -refiriéndose al alcalde Maya- está gobernando como si tuviera una mayoría que no tiene" y avisó de las consecuencias que puede tener para el futuro. "No pueden continuar de esta manera si quieren aprobar las inversiones sostenibles en mayo", señalo Leoz, que afeó a Echávarri por descalificar las enmiendas aprobadas.

Tensión Maya-Asiron. En el último turno de palabra del debate se produjo un enfrentamiento dialéctico entre Enrique Maya y Joseba Asiron, después de que el alcalde pidiera al portavoz de Bildu silencio en varias ocasiones. "Al siguiente aviso le echaré de la sala", señaló Maya. "Écheme si quiere", le respondió Asiron. El alcalde le avisó dos veces y recordó que al tercero sería expulsado de la sala.

Dos nuevos concejales especiales. Ayer se procedió al nombramiento de Fernando Aranguren como concejal especial de Deporte y Juventud y al de Fernando Villanueva como concejal especial de Sostenibilidad y Ecología.

Modificación de la Junta de Gobierno. Los integrantes del órgano de gobierno municipal, en el que solo están representantes del grupo Navarra Suma, ha cambiado tras la incorporación de Fernando Villanueva en sustitución de Arturo Lecumberri.

Luz verde al proyecto comercial y residencia en la Meca. Los grupos municipales dieron el visto bueno al proyecto promovido por Morea Inversiones junto a la Casa Misericordia en la calle Abejeras, donde se construirá un edificio comercial y de servicios en una parcela de 5.000 metros cuadrados. Contará con un hotel AC de 10 pisos con 100 habitaciones, una residencia de estudiantes de 180 plazas, otra residencia para personas mayores de 80 plazas, y un hipermercado E.Leclerc de 2.000 metros cuadrados con restaurante y dos plantas subterráneas de aparcamiento.

Duración. El Pleno empezó a las 16.30 horas y acabó a las 22.30 horas.