Amillano ya forma parte del abastecimiento controlado por Mancomunidad de Montejurra. Un proyecto con el que se pone fin a los problemas de agua de boca con los que ha tenido que lidiar este concejo perteneciente a Allín. Y es que desde que fallara alguno de sus manantiales y se comprobara que las aguas del depósito contenían nitratos, se tomó la determinación de que la población se incorpora al servicio de aguas de la Mancomunidad de Montejurra con lo que no solo asegura “un suministro de calidad de agua potable si no que pone de manifiesto el compromiso de Mancomunidad con todos las municipios de Tierra Estella sin importar su tamaño o número de habitantes”, aseguró el gerente de la entidad, Nicolás Ulibarri.

Una incorporación que para el director general de Administración Local y Despoblación del Gobierno de Navarra, Jesús Mari Rodríguez demuestra los esfuerzos del Ejecutivo en la lucha contra la despoblación y la importancia de dotar a las localidades rurales de servicios básicos. “Este proyecto no solo garantiza el acceso a agua de calidad, sino que también refuerza el compromiso con la sostenibilidad y el bienestar de las pequeñas localidades. La gestión del agua es un elemento crucial para el desarrollo”.

En este sentido, también la presidenta de la Mancomunidad de Montejurra, Susana Castanera, destacó que este logro ha sido posible gracias al esfuerzo y la coordinación entre el Concejo, el Ayuntamiento de Allín, la Mancomunidad y el Gobierno de Navarra. “Este proyecto demuestra nuestro compromiso con las pequeñas localidades. Ningún pueblo es demasiado pequeño para merecer un servicio de calidad, y la colaboración entre todas las instituciones ha sido clave para hacerlo posible”, afirmó.

La alcaldesa de Allín, María Lourdes Lana agradeció la colaboración ya que “hoy podemos decir que Amillano tiene garantizado su futuro en cuanto al suministro de agua potable y esperamos que en el futuro también pase los mismo con el proyecto Echávarri, Galdeano, Aramendia y Muneta”.

Las obras realizadas fueron descritas por Víctor Pinillos, director de producción de la Montejurra y que han consistido en la comunicación del agua potable procedente de Itxako, conectando Amillano con la red general de la Mancomunidad de Montejurra. “Una conducción a través de una tubería de fundición dúctil DN80, atravesando una finca de 27 metros. Todo ello se ha realizado en un plazo de dos meses y con una inversión de 131.000 euros (sin IVA)”. Los trabajos también han consistido en la limpieza del depósito y la sustitución de todos los contadores.

Entre las temas pendientes está la colocación de instrumentos de monitoreo y control del depósito que estarán conectados al sistema de telemando de la Mancomunidad, “lo que mejorará la eficiencia en la gestión del agua”. Asimismo, en enero de 2025, la empresa pública NILSA transferirá la gestión de la fosa séptica de Amillano a la Mancomunidad, completando así la gestión integral del ciclo del agua en la localidad.

“Desde Amillano ya llevamos varias legislaturas con este tema y por fin lo vemos realizado”, aseguró la presidenta del concejo, Marta Sainz San Martín quien aseguró que “por fin hemos superado los momentos en los que no había seguridad y que tuvimos que recurrir a camiones cisterna para el abastecimiento del agua de la localidad”.