El AEK de Lodosa, el que da servicio a toda la zona y que cada vez cuenta con más adeptos, acaba de estrenar sede en la localidad ribera, y es que, tras haber estado en la calle San Blas durante 13 años, se ha trasladado a la calle Ancha, frente al Consistorio, un espacio, explicaron, más amplio y con más posibilidades.
Maite Pellejero e Irantzu Azpiazu, dos de las docentes, se encargaron de dar la bienvenida a las personas que se acercaron a la inauguración del local. “No es sólo un euskaltegi, es un lugar en el que os tendemos la mano para todo aquello en lo que os podamos ayudar. Hemos cambiado muchas cosas en este espacio, pero no la forma de enseñar y la manera de acompañaros en vuestro proceso de aprendizaje del euskera. Apostamos por grupos pequeños, horarios flexibles y un trato cercano. Sabemos que aprender de adulto es diferente”.
Diferentes niveles
En estos momentos están cuatro profesoras; además de Maite e Irantzu, imparten clases Ángela Aristimuño y Ane Etxandi en los siete grupos que hay en Lerín y Azagra (iniciación); B1, C1 y Solaskide, en Lodosa; A2, en Andosilla; y A1, en Allo y Andosilla.
Al son de la txalaparta de Malkoak TX, grupo formado por Juan Salanueva y Jon Salanueva, agradecieron “al alumnado actual, que estáis haciendo el esfuerzo de aprender euskera con AEK, a los y las que estuvieron y siguen con nosotras de alguna manera apoyándonos, y a quienes colaboráis siempre”.
En Galtzagorri AEK “no hay prisas ni presiones. Hay apoyo, claridad y buen ambiente con profesoras que os guían y se adaptan a vuestro ritmo. Porque nunca es tarde para aprender algo nuevo. Este euskaltegi no tendría sentido sin las personas que confiáis en él, nos acompañáis y creéis en el valor de seguir aprendiendo”.
Fin de fiesta
Para terminar, y antes de salir en ronda al son de Andosillako Txistulariak, recalcaron la importancia de las becas de Errigora, así como las ayudas de los Ayuntamientos de Lodosa, Andosilla, Allo y Lerín, y del Gobierno de Navarra.
