Los grupos municipales de PSN-PSOE y Podemos-Ahal Dugu del Ayuntamiento de Burlada reprueban a la alcaldesa de Burlada, Ana Góngora (Navarra Suma), por no haber procedido, casi medio mes después de la riada, al cese inmediato del Jefe de Policía Municipal de Burlada, Javier Lizarraga. El responsable de seguridad presentó ayer ante el Ayuntamiento su renuncia.

Para los grupos "la gestión por parte de jefatura de seguridad de las inundaciones de este mes de diciembre ha sido, de lejos, la peor conocida en décadas: sin avisos suficientes ante el nivel previsible de la crecida y sin una mínima organización".

"Mientras en otras Policías colindantes reforzaban el servicio para hacer frente a las crecidas que se avecinaban, en Burlada nadie se ocupó de reforzar el servicio o prestar una atención a la ciudadanía proporcional a la gravedad de la situación. Además, tampoco podemos entender cómo, desde un punto de vista humano, se diera prioridad policial a salvar bienes materiales frente a la integridad física de ciudadanos y ciudadanas que se veían en peligro", consideran los firmantes.

Destacan que "la jefatura de Policía ni coordinó una respuesta, ni movilizó los recursos posibles, ni ha habido prevención ni planificación. Eso se suma a los ya numerosos problemas enquistados que sufre la plantilla de Policía desde que Lizarraga y Navarra Suma están al frente de este Ayuntamiento".

Informan los grupos de que "nadie en el servicio se ocupó de buscar los medios necesarios para avisar al vecindario de la zona inundable con la eficiencia suficiente ante la magnitud de la riada. Vimos una total despreocupación por las consecuencias de lo que se estaba fraguando y luego llegaron los lamentos". La gravedad en la dejación de funciones es mayor aun cuando existe, indican, un "protocolo de actuacion en el Ayuntamiento que tiene previsto actuar con casi la mitad de la previsión de la riada. Además, existe sobrada experiencia por riadas anteriores, si bien no de tanta gravedad como ésta. Hubo otros recursos municipales que sí se movilizaron con cierta anticipación, pero -por desgracia- no fue suficiente".

Las inundaciones vividas han sido "un duro golpe a la sociedad burladesa y el Ayuntamiento debe actuar ahora con celeridad, rigor y pensando en el interés general y, dentro de esa responsabilidad colectiva, está la de depurar responsabilidades con el fin de que podamos mitigar la próxima vez las consecuencias de inundaciones con previsión de gravedad".

Han lamentado también los daños consecuencia de las inundaciones y mandado su solidaridad y compromiso con los burladeses y burladesas para buscar soluciones "lo más pronto posible".

Para finalizar, los grupos han querido mandar un "fraternal y cariñoso saludo y reconocimiento a todas las personas voluntarias, vecinas, vecinos y parte del personal municipal que sí han sido conscientes de sus obligaciones y han trabajado incansablemente por el bien común de Burlada y por volver a la normalidad lo más rápido posible".