pamplona - “Llevamos cuatro años esperando a veros en la calle, ya nos ha costado?”, bromeaba ayer la concejala delegada de Seguridad Ciudadana y Convivencia, Itziar Gómez, con los dos bicipolis que estrenaron el nuevo servicio, un patrullaje sobre dos ruedas que es ya una realidad en Pamplona. “Es un proyecto muy importante y se suma a todo lo que se está haciendo en torno a la sostenibilidad. Y sobre todo ahora, cuando pongamos en marcha la ordenanza de movilidad, en la que nos va a tocar bajar las bicis de la acera, informar de que los ciclistas tienen que caminar en los pasos de cebra?”. La semana que viene, avanzó, presentarán la campaña de divulgación de la nueva norma, en la que también los patinetes van a estar regulados.

Ataviados con el casco, las gafas de sol, el uniforme azul y luces reflectantes en sus nuevos medios de transporte, Ignacio y Francisco Javier llevaban desde las tres de la tarde circulando sobre el sillín, “unas cuantas horas”, porque no terminaban hasta las diez de la noche. Asumían que es un poco “durillo”, aunque hagan el servicio -de momento un proyecto piloto que durará hasta octubre y se llevará a cabo siempre que la climatología acompañe- en turnos de mañana o de tarde.

Trabajan a demanda, si les llaman, y de oficio si son testigos de alguna irregularidad. Ayer, en su primera jornada laboral en bicicleta, interceptaron a un coche que circulaba sin seguro, acudieron a atender una llamada sobre una persona que se encontraba tirada en la vía pública (alcoholizada), y llamaron la atención a más de un dueño que llevaba suelto a su perro.

Serán en total 8 agentes los que formen parte de este nuevo modelo de policía de cercanía, una unidad que forma parte del área de prevención y proximidad y que patrullará por diferentes zonas de la ciudad como los Ensanches, la Taconera o el parque fluvial del Arga, aunque también cubren Mendebaldea, San Jorge, Rochapea y, sobre todo, las zonas menos accesibles en coche como el Casco Viejo o los parques. “En las zonas verdes y en el Paseo del Arga es donde más se ha sorprendido la gente. Hay ciertos lugares en los que no están acostumbrados a vernos, espacios que con la bicicleta son mucho más accesibles”, señalaban.

Y precisamente esa es una de las grandes ventajas que les ofrecen las dos ruedas, sobre las que son más rápidos que cuando patrullan a pie y llegan a muchos más rincones que con el vehículo.

carril bici “Hemos visto alguna dificultad y es que en las aceras que están compartidas, el carril bici no se distingue bien en algunos tramos. En Pío XII lo que se está haciendo está mucho mejor pero creo que queda mucho trabajo por hacer en ese sentido”, demandaban a la concejala.

Ayer vieron a mucha gente sobre su bicicleta con los auriculares puestos, y en eso también hacen hincapié: “Se denuncia muy poco pero se ve mucho, por eso también solemos informar”, explicaron, y propusieron una campaña en este sentido “porque es peligroso, y muchas bicis incluso no respetan los semáforos”. Destacaron que hay muchos accidentes en bicicleta, “atropellos sobre los que hay que concienciar”.

En la academia recibieron algunas horas de formación normativa, de legislación, de seguridad y prevención y técnicas de utilización de la bicicleta como herramienta de trabajo. El mayor problema, de momento, es saber dónde dejar su nuevo medio de transporte, dado que -aunque tienen candado- las prisas a las que responden las urgencias que deben atender cuando están de servicio no siempre son buenas. “Si hay una pelea de maltrato de género dentro de una vivienda tienes que dejar la bici y subir corriendo porque igual hay una agresión... Y a veces es un problema dónde dejar la bici”, remarcan.

Notan que el chaleco también da calor y los cinturones pesan más -“alguno ya nos ha preguntado a ver cómo lo vamos a hacer en agosto y a 25 grados”, bromeaban- pero asumen que estar más cerca de la gente siempre es bueno. Porque cuentan con la cercanía y la proximidad que brinda el patrullaje a pie, aunque con mucha más rapidez y versatilidad.

“El poder acceder a casi cualquier lugar es muy positivo, aunque también tienes que estar más atento porque si te metes entre coches a veces es peligroso para nosotros”, señalaban, apuntando que con el uniforme amarillo antes se les veía más. “En la carretera los coches van con precaución, aunque creo que porque ven que somos policías. Más de uno nos ha echado alguna foto”. Y es que hasta que la ciudad se acostumbre de momento están viviendo una especie de periodo de adaptación, casi como el de los propios pamploneses, porque ver a un policía sobre una bici - quien más o a quien menos, le llama un poco la atención.

El servicio. Hay un total de 8 bicipolis que se encargan, en parejas y en turnos de mañana y de tarde, de patrullar por la ciudad sobre las dos ruedas, llegando a lugares hasta ahora inaccesibles con sus vehículos.

Proyecto piloto. El patrullaje en bicicleta es un proyecto piloto que durará hasta octubre y se llevará a cabo siempre que la climatología acompañe. Complementa el patrullaje ya existente en vehículo, moto y a pie.

Las zonas. Cubren toda la ciudad, aunque priorizan zonas peatonales como el Casco Viejo y parques o espacios como el paseo fluvial del Arga.

francisco javier “hay que trabajar en mejorar el carril bici”

Los agentes que ayer estrenaron el nuevo proyecto piloto de patrullaje sobre las dos ruedas coincidieron en que en algunas zonas de la ciudad hacen falta mejoras en torno al carril bici, para visibilizarlo mejor, y apuntaron la necesidad de realizar campañas para mejorar la seguridad y la convivencia entre peatones, vehículos y bicicletas.