na vez finalizadas las no fiestas de San Fermín los pamploneses y pamplonesas se animan a dejar la ciudad para irse a la playa. Este 14 de julio tan atípico dejó una sensación de tristeza pero muchos pamploneses, en su mayoría jóvenes, le han dado la vuelta a la crisis. Han cogido su silla, la sombrilla, las maletas y este año como novedad, también las mascarillas, para dirigirse a la costa. Unos han cogido el coche, otros el autobús y los hay que se han decantado por el tren.

En estos momentos la ciudadanía opta por viajar a otras comunidades pero han esperado a que pasaran los Sanfermines. "Primero pensamos que igual se celebraba algo aunque fuera tranquilo, pero tampoco hubo fiesta; esperábamos que viniera más gente de fuera, pero no vino nadie", confirmó Rubén Eguinoa, un joven que se iba en dirección a Salou. Este destino es el más demandado en estas fechas, además del de San Sebastián. "Estamos a tope, y porque no ponemos más autobuses, porque sino iría más gente", explicó Cristina, conductora de la compañía Monbus.

Respecto a las medidas de seguridad, los pasajeros únicamente tienen que hacer uso de la mascarilla de manera obligatoria en todo el trayecto. "Ahora empieza a haber más movimiento, los autobuses van al 100%, pero en los 'no Sanfermines' sí que notamos una bajada porque no vino prácticamente ningún turista, no sé si por miedo o qué, pero ya se están animando más", expresó Eva, trabajadora de la empresa BilmanBus.

Por otro lado, en cuanto al autobús Hife que hacía escala en Tudela y Zaragoza antes de llegar a Salou y Cambrils, las 2/3 partes de los pasajeros se dirigían a la Costa Dorada, según confirmó Ernesto, su conductor.

Desde que se permitió viajar entre comunidades, las empresas pensaban que debido a los nuevos rebrotes la ciudadanía iba a tener más miedo a la hora de visitar otro lugar, pero "hemos comprobado que no, la gente tiene ganas de salir y cambiar de aires, estamos teniendo cifras como si fuera un verano normal", añadió Eva.

Una cuadrilla que esperaba para irse de vacaciones en la Estación de Autobuses de Pamplona contó que no tenían ningún plan para verano, "no teníamos nada cogido y ha coincidido que hemos tenido vacaciones en el trabajo así que hemos decidido aprovechar que una amiga tiene un apartamento en Salou para darnos una escapadica", señalaron.

Antes de iniciar el viaje los turistas consultaron a amigos de la zona de Salou o familiares que ya están allá acerca de las medidas de seguridad y para conocer el ambiente. "Nos han contado que la playa está muy tranquila, que prácticamente no hay nadie, así que no nos preocupa. Solo vamos a despejarnos", subrayan.

"Nos han dicho que hay poca gente, pero cuando lleguemos allí veremos si vamos o no a la playa. Vamos a pasar unos 5 días con la cuadrilla a casa de otro amigo que tiene un piso allá", reiteró Rubén.

Por otro lado, a Amaia y Leire, dos amigas optaron por la playa para ir de vacaciones les "preocupa un poco tener que estar las 6 horas en el autobús con la mascarilla puesta, porque al final es un incordio, pero estamos mentalizadas de que, igual que aquí, tendremos que llevar la mascarilla para todo", declaró Leire.

Desde el restaurante Mintxo en Salou, el pamplonés Fermín Reta y su mujer, Carla García de Barcelona, confirmaron la llegada de más navarros:"Desde hace varias semanas sí que notamos que los navarros se acercaban a ver cómo estaban las playas. Esperábamos más gente en Sanfermines, por eso de que no hubo fiestas, pero ahora sí que tenemos alguna reservica más para este fin de semana", expuso Fermín.

También la oferta de trenes con destino Barcelona ha aumentado en un 50%. Antes contaban con 2 trenes y ahora han reforzado el servicio con un tren más. "Conforme la demanda aumente se incrementará el número de trenes disponibles", indicó Álvaro Echaniz, desde Renfe.

"La gente tiene ganas de salir y cambiar de aires, como cualquier verano"

Trabajadora de BilmanBus