arbizu - Día grande de las fiestas, este lunes se estrenó el grupo de dantzaris txikis de Arbizu, diez niñas de entre 5 y 10 años que salieron muy airosas de esta prueba de fuego en la plaza ante numeroso público. Lo cierto es que en el grupo también hay dos chicos pero no bailaron porque les daba vergüenza, como apuntaron estas niñas. Eran Harane Jaka, Maddi Gartziandia, Sihets Agirre, Malen Izagirre, Maddi Berastegi, Elorri Mendinueta, Ekhine Lizarraga, Amets Asa y Joane Nazabal.

Desde septiembre, todos los lunes, han aprendido distintas danzas con Garazi Jauregi y Nahia Bengoetxea, que ayer les acompañaron para recordarles los pasos por si se les olvidaban. Lan-tzeko zortzikoa, Abaltzisketako txantxoak o Sorgin dantza fueron algunas. “En Arbizu no había tradición de grupos de danzas y pensé que se podía formar uno”, recordaba Jauregi. Así, realizó un llamamiento que no cayó en saco roto. “En septiembre comenzaremos un nuevo curso y realizaremos un nuevo llamamiento”, adelantó, al tiempo que animaba a los niños y niñas a unirse al grupo de dantzaris.

Las celebraciones en Arbizu comenzaron la víspera de San Juan, con una romería a la ermita de este santo, a la que los y las arbizuarras volvieron a acudir ayer. De vuelta a la plaza les esperaba un delicioso ajoarriero ofrecido por Aldabide elkartea, el primer aate de estas fiestas, almuerzos que se sucederán hasta el sábado, siete días en total, acompañado de vino en las tradicionales tazas de plata. A la tarde hay otro, el aperitivo de las largas meriendas-cenas que reúnen en la plaza a numerosas cuadrillas. Y es que los encuentros en torno a una mesa son parte importante de las fiestas de Arbizu. Por ello, algunos las llaman las fiestas de San Jan.

Además, las comidas populares están tomando protagonismo estos últimos años, como apuntaba Monika Etxeberria, que repite esta legislatura como concejala de Cultura y Festejos. Estas fiestas hay cinco. La primera es hoy, para los mayores. Este miércoles habrá otra de jóvenes y el jueves será de los y las txikis. El viernes será kantuz bazkaria, una comida con una larga sobremesa en la que unir las voces. El sábado, último día de fiestas, será en torno al concurso de paellas.

En relación al programa, Etxeberria señaló que es parecido al de otros años, con actividades todos los días dirigidas los y las txikis. Además, en Arbizu todos los días pueden saltar en un castillo hinchable en la plaza, propiedad del Ayuntamiento y del que se encargan los padres y madres. El presupuesto de estas fiestas también es el mismo que estos últimos años, 35.000 euros.