villafranca - Por segunda vez en apenas tres meses, la memoria de una mujer de 24 años violada y asesinada en Villafranca en 1936 ha vuelto a ser objeto de un acto vandálico. En la noche del pasado 31 de diciembre, el cartel que da nombre al parque Carmen Lafraya en la localidad ribera de Villafranca ha sido objeto de ataques con pintura para tratar de ocultar el nombre de esta joven fusilada el 29 de septiembre de 1936 después de haber sido violada por un grupo de falangistas en el término municipal de Cadreita en presencia de su padre, Esteban Lafraya, que igualmente fue asesinado. Es la segunda vez que dicha placa sufre un ataque de este tipo, desde que la Comisión para la Memoria Histórica de Villafranca llevara a cabo un homenaje con la colocación de placas en recuerdo de todas las mujeres de Villafranca represaliadas (figuran el nombre de todas ellas) y de Carmen Lafraya, en particular. Esta comisión emitió una nota en las redes sociales para denunciar el acto vandálico.

En la primera ocasión en que se manchó el cartel, la Agrupación Independiente de Izquierdas de Villafranca, que gobierna junto con PSN mediante un pacto, denunció ayer a través de un comunicado que “manos fascistas, amparadas en el cobarde anonimato, habían atentado contra las placas”. Desde esta formación denunciaron el primer ataque que calificaron como “delito de odio” y pidieron a las diferentes administraciones que den los pasos necesarios para que se esclarezcan los hechos, se encuentre a los culpables y se aplique sobre ellos la ley. “El ataque perpetrado nos hace temer el repunte de ideologías, comportamientos y actitudes que se creían superados, y deben hacernos estar alerta para combatirlos con todos los medios legales”. Este nuevo ataque confirma sus temores. - F. Pérez-Nievas