"Lo bello, para serlo, no necesita elogios: se basta a sí mismo. No lo afean ni lo mejoran", nos decía Marco Aurelio (121-181) en su libro Meditaciones. Por eso el título de esta carta.

Las personas de Falces son amables, agradecidas, generosas, alegres, solidarias, responsables, laboriosas, honestas, de alma abundante y corazón generoso. Hablamos con conocimiento de causa porque, como decimos en nuestro pueblo, "no tenemos para olvidar" el trato que recibimos el día que estuvimos, invitados en un festival organizado en agradecimiento a la atención prestada por la Clínica Josefina Arregui a un paciente falcesino.

Dejó escrito Thomas Mann que no hay que avergonzarse de ninguna palabra cuando son la amistad y/o la música quienes nos la sugieren. En este caso, la palabra es amor. En las dos facetas. Sin límites. Eso sí, nada de amor ciego, sino con la vista bien clara; no en vano es un pueblo que sabe corresponder a quien le ayuda y que cultiva con esmero y delicadeza el arte de la música. Parafraseando a Octavio Paz, nos sentimos legitimados para aseverar que se trata de una comunidad de relaciones afectivas que crean bienestar y donde nadie se siente solo. 

He ahí la belleza. ¡Que nos hablen de ella si pueden!, como propone Nagib Mahfuz. ¿Quién es gentuza?

Patxi Goikoetxea, presidente Amigos Clínica Josefina Arregui Lagunen Elkartea