A los entrenadores no les gusta hablar de finales, y a pesar de que Arrasate ha querido rehuir del término en la rueda de prensa, lo cierto es que Osasuna afronta esta tarde (18.30 horas/‘Movistar LaLiga’) un duelo crucial por eludir la parte baja de la tabla, sobre la que dispone de un colchón de seis puntos de ventaja.

Ganar al Huesca esta tarde supone para Osasuna ganar el gol averaje a un nuevo rival al que, al mismo tiempo, le sacaría tres puntos más de ventaja. Puntos con los que la entidad rojilla superaría la barrera de los 30 y significaría dar un gran paso para conseguir una permanencia que parecía complicada en los trece encuentros sin ganar que atravesó el cuadro rojillo a final de la primera vuelta.

Delante, el cuadro de Jagoba Arrasate tendrá un Huesca cambiado al de la primera vuelta. Con la llegada de Pacheta en detrimento de Míchel, al que el buen juego que desplegaba su equipo no le acompañaban los resultados en forma de puntos, el Huesca ha cambiado de sistema, pero sigue en las posiciones de descenso que ocupa desde la séptima jornada liguera. También es cierto que el cuadro altoaragonés, que parecía desahuciado, se encuentra a cuatro puntos de los puestos de permanencia que ocupa el Elche, a falta de once encuentros para la conclusión del campeonato.

Osasuna, que empieza la jornada en decimotercer lugar de la tabla, tiene el gol averaje ganado con Alavés y Eibar, los otros dos equipos que acompañan al Huesca en posiciones de descenso a Segunda División, y salir con tres puntos de su visita al Alcoraz significaría ganarle el averaje, también, al cuadro oscense, después de que el partido de la primera vuelta finalizara en tablas (1-1).

Cabe destacar en la expedición rojilla que se desplazará a Huesca el regreso del Chimy Ávila 421 después a una convocatoria. El argentino ha permanecido 14 meses alejado de los terrenos de juego por dos lesiones de ligamento cruzado, una en cada pierna. Todavía no está en su mejor versión, como es normal. Cargarle de responsabilidad no es bueno ni justo, no va a ser el salvador de nada y él sabe que desde una convocatoria también se puede ayudar. Él nos quiere dar goles, pero todo llegará a su debido tiempo”, comentó al respecto Jagoba Arrasate, que ha podido contar con Oier, Roberto Torres y Unai García después de dar negativo en la prueba PCR a la que se sometieron tras perderse el último partido al estar confinados.

El delantero rosarino se sentará en el banquillo ante su exequipo tras haber luchado estos últimos meses por volver lo antes posible con sus compañeros tras caer lesionado por segunda vez el pasado 9 de septiembre. Todo hace indicar que tendrá minutos la próxima semana en el amistoso que Eibar y Osasuna disputarán en Mondragón. Su presencia en El Alcoraz servirá para meterse en la dinámica grupal.

Los que también regresan a casa son Juan Pérez y Enric Gallego. El portero, que salió de las categorías inferiores del Huesca para recalar en Osasuna, cumplirá su deseo de jugar en El Alcoraz después de que Sergio Herrera, otro exjugador del Huesca, permanezca confinado en su domicilio por haber sido contacto directo con un positivo en covid. El catalán defendió durante media campaña la camiseta oscense en la temporada 2018/2019.