El consejero de Seguridad del Gobierno Vasco, Josu Erkoreka, justificó ayer el retraso del autobús de Osasuna a su llegada el martes por la tarde al estadio de San Mamés en el hecho de que “no había forma de garantizar su seguridad”.

El inicio del partido entre Athletic y Osasuna, correspondiente a las semifinales de la Copa del Rey, tuvo que ser retrasado diez minutos debido a los problemas del autocar del equipo navarro para acceder al estadio bilbaíno.

El club rojillo explicó en sus canales de comunicación oficiales que su expedición llevaba “retenida por la Ertzaintza más de media hora” y no podía “acceder a San Mamés, cuando su llegada estaba prevista a las 19.30 horas. Un hecho sin precedentes en las visitas a este estadio”.

En una entrevista concedida ayer al programa Faktoria de Euskadi Irratia, Josu Erkoreka explicó que no se daban las condiciones para “garantizar la seguridad del autobús de Osasuna”.

Erkoreka precisó que había mucha gente en las inmediaciones de San Mamés y que por ese motivo no se pudieron cumplir los horarios establecidos para la llegada de los autobuses de Athletic y Osasuna.

Además, dijo que, ante los ataques sufridos por el convoy que protegía al autobús –al parecer, le lanzaron vasos y botellas–, se decidió desviar la ruta del autobús rojillo, lo que motivó el citado retraso.

En cualquier caso, el consejero anunció que dará estas mismas explicaciones a Osasuna, “aunque han ganado y no creo que tengan motivos para quejarse”, señaló para abrochar el asunto.