Mientras aún resuenan los acordes de Estopa en los oídos de muchos navarros, hay unos miles que andan con una sonrisa bobalicona, como en un estado de felicidad permanente que hace muchos años que no se recordaba. Ese que se produce cuando tu equipo humilde destroza y golea al líder.
Osasuna se marchó del campo con una felicidad tal que no se podía borrar la sonrisa a nadie. La felicidad era compartida, pero también individual. No la podía disimular un Vicente Moreno al que le brillaban los ojos como quien da un golpe tremendo sobre la mesa. No ha tenido que ser nada fácil convivir estos meses bajo la alargada sombra de Jagoba, pero la realidad es que a 28 de septiembre el entrenador rojillo no solo no ha gastado el margen de maniobra, sino que se ha ganado un buen crédito. 14 puntos, golear al líder, solo haber perdido dos puntos en casa...y contra el Barcelona acompañó el juego. Este inicio de temporada es de notable alto y cada vez se acerca más al sobresaliente en cuanto coja una fluidez importante fuera de casa.
Pero esa felicidad también la tenía que tener alguno en el palco. En la victoria contra el Barcelona marcaron Bryan y Abel mientras que Boyomo se comió a todo un Lewandowski. Los tres fichajes por los que el director deportivo había realizado una apuesta económica importante y que están rindiendo a un nivel muy alto. Como también lo está haciendo Catena tras un año regulero. Braulio, tras estos años, no necesita refuerzos de confianza, pero demuestra que sigue en la misma línea de acierto.
Tampoco andará muy lejos en esa felicidad un Pablo Ibáñez que calló todas esas opiniones que mezclan fútbol con contratos. El chaval es un jugador prototipo de Osasuna y, por su bien y por el del club, que su representante (el afamado Taínta) y el club se pongan de acuerdo. No hace tanto que sellaron un contrato por diez años por Moncayola, seguro que no es tan difícil cerrar uno más normalito en todo tipo de cifras.
Y todo esto sin hablar de que Budimir ya está como la temporada pasada, de que Bryan hizo lo que quiso con todo rival que se acercaba o que Areso tendrá que ser donado a la ciencia para que le estudien cuántos pulmones tiene. Victoria histórica, de las que se recuerdan durante muchos años.
