La contracrónica del Mallorca-Osasuna: Piel de Cordero

La piel de cordero es la “apariencia inofensiva y bondadosa que encubre propósitos, normalmente negativos, que no se corresponden con ella”. Nunca una definición pegó tanto con un apellido como el que lució el señor colegiado del Mallorca-Osasuna. Cordero Vega descifró un arbitraje sin inmiscuirse mucho en el partido hasta que tuvo que tomar decisiones de calado y ahí se quito la piel de su apellido para mostrar todas sus costuras. 

Muriqi cayó dentro del área con todo su corpachón tras un contacto de Catena dentro del área. El central, que firmó su segundo partido consecutivo regular tirando a mal, picó y no debió meter la pata, nunca mejor dicho, ahí, pero pensar que con ese contacto tiras a semejante delantero deja mucho que desear. Antes le había castigado con una amarilla a Aimar por protestar un pisotón al borde del área que se vio desde el mítico Tututango mallorquín (incluso aunque ahora ya no exista, creo). 

Pero, sin duda, la jugada más polémica fue una mano de Maffeo dentro del área que es el típico penalti ridículo que se pita desde que hay VAR. Se pita menos en Son Moix a favor de Osasuna. Y como el criterio de las manos dentro del área cambia según pite (y a quién) pues vaya usted a saber si es punible, no, o tal vez. Seguramente no lo sepan ni los propios árbitros.

Por suerte, Boyomo evitó que Osasuna se fuese de vacío de Mallorca, algo que hubiese sido tremendamente injusto. Y además el que empató fue el mejor jugador de los rojillos. El central camerunés cerró un partido espectacular con un tanto en el que Budimir, Catena y Barja ayudaron lo suyo. Lo peor es que el defensa no podrá estar contra el Real Madrid por acumulación de tarjetas.

Vicente Moreno acertó con los cambios, especialmente con la entrada del de Noáin, quién demostró ser un buen revolucionador, papel importante ahora que Bryan ha vuelto a la titularidad.  

Osasuna cuajó un buen partido en el que no mereció perder ni queriendo y en el que, si alguien tuvo que ganar, fueron los navarros. 

Pero se cruzaron con un lobo con piel de cordero. Y esperen sentados, que ahora viene el Real Madrid. A lo mejor Osasuna se tiene que abrir una tele con urgencia y ponerse a hacer vídeos para igualar la turra que darán desde la capital blanca. Ah! Y el petardo de Buyo, eso sale seguro.