Se adelantó Osasuna en Leganés, donde finalmente no pudo ganar (1-1) por un montón de avatares del fútbol y la vida, con un gol de un central, Jorge Herrando, que logró así su primer tanto en la máxima categoría –ya había anotado esta temporada en Copa en el campo del Tenerife–. Y no remató, en el sentido figurado de la expresión, el conjunto navarro a su adversario porque Ante Budimir, pichichi rojillo en esta Liga con 15 dianas, no tuvo su día y marró hasta tres claras ocasiones de gol.
Antes de que Jorge Herrando marcara el 0-1, al poco de comenzar la segunda parte, el delantero croata de Osasuna ya había desaprovechado a puerta vacía en la primera parte una buena asistencia de Jon Moncayola. Tal vez falló por intentar rematar con su pierna buena, la zurda, en lugar de con la derecha, pero la cuestión es que no atinó y el marcador no se movió, algo que sí pasó de forma fugaz antes del descanso, ya que el árbitro anuló un gol de Lucas Torró a instancias del VAR por un más que dudoso fuera de juego de Rubén García, que ejerció de asistente en la jugada.
La cuestión es que a Budimir se le presentaron otras dos buenas ocasiones para marcar después del 0-1 de Herrando –sin contar un buen remate a la media vuelta que se marchó fuera por poco justo poco antes del descanso–, pero este lunes no tuvo su noche. Primero fue Rosier el que desvió a córner otro remate del croata casi a puerta vacía tras otro buen servicio de Rubén García en el minuto 57, y 20 después no supo resolver un mano a mano con Dmitrovic, pues el meta serbio del Leganés se convirtió en un gigante para el atacante rojillo.
Lo que ocurrió en la recta final del encuentro es que el Leganés aprovechó un penalti que Abel Bretones nunca debió cometer para hacer el empate definitivo (1-1) al transformar Dani Raba el lanzamiento desde los once metros.
Al término del partido, Jorge Herrando mostró el sentir del vestuario en declaraciones para Movistar: “Muy jodidos. Creo que hemos hecho un buen partido, encima te pones por delante, hemos tenido ocasiones para matar el partido y llevarnos los tres puntos. Este es un campo muy difícil y en una acción se nos va el partido”.
También habló del gol anulado a Lucas Torró por un fuera de juego dudoso de Rubén García: “Lo he visto... y hay que confiar en eso, es muy al límite. Hemos tenido muchas ocasiones para matar el partido, no lo hemos hecho y eso nos ha matado”.
Osasuna, que en Liga sólo ha sido capaz de ganar un partido de los últimos 18 que ha disputado, necesita, en palabras de Herrando “una pizca de suerte, pero confiar en que, si hacemos estos partidos así, seguro que vamos a ganar”, porque “es lo que tiene, muchos partidos en los que nos está costando ganar. Queríamos la portería a cero, no ha podido ser, pero creo que ese tiene que ser el camino”.