"Ya no me da para comer". La comerciante boliviana Julia Vargas Gutiérrez va a cerrar después de 5 años su tienda K'chitu de San Juan y ha lanzado una llamada a través de los medios de comunicación para que Pamplona, en la que lleva más de una década, le ayude. Está liquidando la tienda, con descuentos de hasta el 80%, y quiere vender todo el género.

En una carta, Julia Vargas se dirige a la ciudadanía porque "me gustaría contaros mi historia". Así recuerda que soy "una mujer originaria de Bolivia que lleva más de 19 años viviendo en Pamplona" y que "hace casi 5 años emprendí el viaje de abrir mi propio negocio, después de estar trabajando casi toda una vida en la hostelería".

Explica que "K´chitu (Del quechua K'achitu - Bonito) es el nombre que elegí para dar lugar a un local de moda y complementos, tanto para mujer como para hombres. Situada en el corazón de San Juan, en la avenida de Bayona 24, pero dando acceso por Monasterio de Urdax, fue una de las aventuras más bonitas que pude vivir". Porque "pasé de servir más de 200 comandas al día, como trabajadora de la hostelería, a ayudar a Rosa a elegir un bolso". "El cambio fue brutal", añade.

La comerciante recuerda que lo que empezó como un proyecto ilusionante se fue yendo a pique después de la pandemia. "Pero esta felicidad no iba a durar mucho, ya que en año 2020 vino el COVID y con ello el cerrar las puertas durante un largo periodo de tiempo. Esto no ayudó al crecimiento del negocio, ya que el mundo se paraba, pero las deudas no. Fue como si me echaran un jarro de agua fría, no sabía qué iba a suceder. Pero gracias a Dios, pudimos salir de este bache y seguir hacia adelante".

Añade que meses después, "la vuelta no fue la misma, las compras online se dispararon mientras que las tiendas pequeñas se hundían lentamente. Durante 3 años, se pudo aguantar medianamente bien, pero este último ha sido la gota que colmó el vaso. Retrasos de pagos, deudas, subida de cuota autónomo, aumento en la seguridad social, etc. han decidido que este proyecto que con tanto amor y cariño empecé a construir, llegue a su fin".

De este modo, "K´chitu tiene previsto cerrar la última semana de este mes, liquidando todos sus productos".

Es por ello, que "estaría muy agradecida si llegaran a compartir esta historia y así ayudarme en mi última etapa como autónoma", ya que "ha sido un proyecto muy especial para mí, pero que a este paso, ya no me da para comer". Y añade: "Las nuevas tecnologías y los precios super competitivos de las grandes empresas hacen que los pequeños negocios cada día sean menos y, al paso que vamos, lamentablemente desaparezcan".