Pedro Sánchez comparece este miércoles en el Congreso para informar sobre la nueva relación con Marruecos lograda tras el giro de la postura española sobre el Sáhara, que ha provocado la crítica unánime de todos los partidos, en un pleno en el que también da cuenta del último Consejo Europeo.

Sánchez ha señalado que la posición del Estado español respecto al Sáhara va en línea con la que mantienen socios como Alemania, Francia, o Estados Unidos y respeta las resoluciones de Naciones Unidas. Además, ha defendido que el cambio de postura respecto al plan de autonomía marroquí para el Sáhara es "la base más sólida, creíble y realista" para resolver el conflicto .

"47 años deberían ser suficientes para entender que tenemos que mover nuestras posiciones", ha sostenido dirigiéndose al resto de grupos, que han criticado el giro del Gobierno, defendiendo que lo que se busca no es otra cosa que favorecer el diálogo y la consecución de una solución mutuamente aceptable entre las partes auspiciada por la ONU.

El pleno ha puesto de manifiesto la soledad del PSOE en su posición respecto al Sahara. El portavoz de Unidas Podemos, Pablo Echenique, ha defendido de forma contundente el derecho de autodeterminación del pueblo saharaui, tras recordar a Pedro Sánchez que "Marruecos es una potencia agresora" y que "el Sáhara es el pueblo agredido".

El PNV ha asegurado que el giro del Gobierno ha sido forzado por Marruecos y la presión migratoria que ha utilizado en las fronteras. Cree que detrás del espionaje a los teléfonos de miembros del Gobierno está Rabat, y lamenta que esta situación haya dejado "unos perdedores que son los saharauis. Son los paganos y la moneda de cambio", ha destacado Aitor Esteban.

EH Bildu ha reclamado a Pedro Sánchez que rectifique su posición respecto al Sahara puesto que no cuenta con el aval del Congreso. "No puede a cambio de mejorar la relación con Marruecos, vender al pueblo saharaui", ha afirmado Jon Iñarritu.