El presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, se ha fijado como uno de sus objetivos durante la presidencia española del Consejo de la UE acordar unos estándares mínimos de tributación empresarial en todos los socios comunitarios y luchar contra la evasión fiscal.

Sánchez ha expuesto esta intención en el acto de presentación en el Palacio de la Moncloa de las prioridades de esa presidencia que en el Estado asumirá el 1 de julio, un acto al que han acudido cinco ministros y, entre ellos, la vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz, quien defendió la víspera hacer permanente el impuesto actual a las grandes fortunas.

No ha habido referencia alguna del jefe del Ejecutivo a esa propuesta, pero sí ha asegurado que intentará que en la Unión Europea se acabe "de una vez por todas con la evasión fiscal de las grandes fortunas y de las grandes corporaciones".

Una evasión que ha dicho que cuesta cada año a la Unión Europea 1,5 puntos del PIB, lo mismo, ha concretado, que se invierte en vivienda protegida y medio ambiente.

Para Sánchez hay que intentar que la riqueza que genera la UE llegue a todos los ciudadanos y sirva para mejorar sus condiciones de vida.

Además, se ha preguntado cómo se puede pedir a los ciudadanos que paguen impuestos y que las grandes corporaciones no lo hagan, reflexión tras la que ha expuesto la intención de trabajar contra esa "injusticia" y para que haya unos estándares mínimos de tributación empresarial en todos los estados miembros, en especial en el ámbito digital.