Desde la Clínica Universidad de Navarra (CUN) hacen referencia al estrés como "aquella situación distinta que vive un individuo, la cual le exige un rendimiento superior a lo normal. Cualquier cosa, buena o mala, que produzca un cambio en la rutina de una persona le puede causar estrés. Las causas más frecuentes son: enfermedad, cambios hormonales en el organismo (pubertad, después del parto, síndrome premenstrual, menopausia, etc.), exigirse demasiado, conflictos en el trabajo o en la familia, la altitud, el clima demasiado frío o caliente y tomar responsabilidades por las acciones de otros".
Las señales de estrés que aparecen cuando duermes, según el cardiólogo Aurelio Rojas
Con más de 176.000 visualizaciones y más de 4.900 me gustas, la publicación del cardiólogo Aurelio Rojas, con nombre de usuario @doctorrojass y que cuenta con más de un millón de seguidores en Instagram, no ha dejado a nadie indiferente. En ella, el experto y creador de contenido explica "cómo el estrés se refleja en el descanso".
"Si duermes con las muñecas flexionadas y los puños apretados, cruzas los brazos, aprietas la mandíbula o arrugas la cara, te agarras el cuello cuando vas a dormir, levantas un brazo o incluso los dos, duermes en posición fetal o cruzas los pies, levantas o cruzas una pierna sobre la otra o agarras fuerte la almohada, son señales de que los niveles de estres y cortisol son muy elevados en tu organismo", explica Aurelio Rojas.
Para combatir el estrés, los especialistas de la CUN dan una serie de consejos: "evite consumir sustancias estimulantes: tabaco, alcohol, café, etc. Reflexione sobre por qué hace las cosas y el fin que busca con ello. Aprenda la manera de relajarse. Haga ejercicio regularmente: caminar, natación, bicicleta, etc. Tenga horarios adecuados para comer y dormir. Realice una dieta sana y adecuada. Si lo necesita, acuda a un psicólogo para reforzar la autoestima. Evite los factores estresantes ambientales. Piense que nadie es perfecto. Piense siempre en positivo, no vea sólo el lado malo de las cosas. No se proponga más cosas de las que va a poder hacer. Tómese un descanso de 5 minutos cada 2 horas cuando realiza la misma actividad. Dedique todos los días algún rato a realizar alguna actividad ociosa, disfrute estando con su familia. Escuche música relajante. A lo largo de la semana, dedique un día entero a descansar y realizar actividades que le gusten y sean distintas de sus obligaciones habituales. Deje tiempo a los niños para descansar, relajarse o divertirse con sus amigos. Adapte las responsabilidades que debe asumir su hijo a su edad y sus capacidades. Aunque esté preocupado por la situación de su hijo, evite atosigarlo con preguntas sobre cómo se encuentra e intente no controlarlo en exceso. Debe dar tiempo a las manifestaciones provocadas por el estrés y observar, sin prisas, cómo evoluciona su conducta. No de por supuesto que cualquier cambio en la vida de su hijo, aunque sea una situación buena, la vaya a vivir como positiva. Sea modelo a imitar por su hijo, no dé muestras de estar estresado".