Tres policías municipales heridos y varios contusionados es el balance que dejan los graves altercados ocurridos este miércoles en Pamplona al finalizar la procesión de San Fermín.
Uno de los agentes sufre una rotura de nariz, otro ha resultado herido en el tobillo por una patada y el tercero, por un vaso o botella que le ha dado en la cara.
Los incidentes se han localizado en la calle Curia, donde no es la primera vez que se producen altercados, aunque no con la violencia desatada este 7 de julio.
Allí se habían congregado varias decenas de personas al término de la procesión, cuando la corporación pamplonesa acompañaba al cabildo hasta la catedral tras la celebración de la misa en la capilla de San Fermín.
Cordón de seguridad
La gran mayoría de los presentes en el lugar ha lanzado consignas contra el alcalde Maya y contra UPN, pero un nutrido grupo ha tratado de asaltar el cordón policial que protegía a los concejales de Navarra Suma y PSN.
Con la calle repleta de gente, con gritos e insultos por todas partes, los agentes a duras penas han podido contener los empujones, manotazos y algunos puñetazos que se lanzaron desde ambos lados de la calzada.
La peor parte se ha vivido al comienzo de la calle Curia, en los primeros metros de la subida, donde la aglomeración de personas ha obligado a los agentes a reducir la anchura del cordón de seguridad.
En la cuesta de la Curia
De uno en uno o de dos han tenido que pasar los concejales de Navarra Suma y de PSN, mientras por delante iban los ediles de EH Bildu y Geroa Bai, que no se vieron implicados en la batalla campal que se estaba viviendo por detrás.
El alcalde Maya y la socialista Maite Esporrín han sido los principales objetivos de los ataques. Muchos fueron insultos verbales, pero algunos emplearon la violencia o lanzaron vasos hacia los concejales o sus escoltas, que tuvieron que emplearse a fondo, por momentos en una pelea cuerpo a cuerpo, para no ser desbordados.
Han sido unos minutos de extrema tensión, hasta que el dispositivo policial ha sido capaz de trasladar a los corporativos hasta la puerta de la Catedral.
Heridos
Hasta ahí ha sido trasladado uno de los agentes municipales, con una herida en la nariz que sangraba profusamente.
Maya estaba desencajado, con el rostro tenso, visiblemente afectado por el momento que acababa de vivir, como su compañero Javier Labairu, concejal de Seguridad Ciudadana, muy nervioso y preocupado por el estado físico de los agentes heridos; o María Echávarri, que cerraba la comitiva al lado del alcalde, y que acabó por los suelos durante la refriega.
Había caras largas en los corporativos en el viaje de regreso hacia el edificio consistorial y preocupación por el estado de los heridos.
Aún se escucharon algunos gritos contra Maya y contra UPN en el descenso de la calle Curia, pero no había ni rastro de los reventadores que poco antes trataron de asaltar la comitiva municipal.
