Los dos fines de semana con los que ha contado San Fermín este año "no han tenido una incidencia especial en el cómputo global de las fiestas", según la Asociación Navarra de Pequeña Empresa de Hostelería. ANAPEH ha confirmado con sus establecimientos asociados que "se mantiene la tónica de pasadas ediciones, con una presencia masiva de público los días 6 y 7" y algo menor el último fin de semana.

Los momentos de mayor presencia han sido en general la hora del vermú y las comidas, con una importante tasa de reservas previas. Las noches, sin embargo, continúan el descenso que ya se venía notando desde hace varios años, en favor del denominado 'tardeo', ha constatado ANAPEH.

En cuanto a la facturación, el "leve incremento experimentado este año", en términos generales, se corresponde "con el aumento del IPC", con lo que el balance es similar a los Sanfermines de 2023.

El consumo en barras y terrazas ha seguido el mismo patrón, con picos en torno a mediodía y un acusado descenso a partir de la salida de las peñas, hora a partir de la cual "el botellón se convierte en protagonista".

"Locales que fomentan el botellón"

En este sentido ANAPEH y la hostelería entienden que "todo el mundo tiene derecho a trabajar, pero este derecho debe darse en las mismas condiciones".

"Mientras los locales hosteleros sirven de baños públicos, de equipos de música y realizan grandes inversiones en licencias, control de medidas sanitarias y de seguridad, asistimos a la apertura de locales que pasan de ser tiendas de venta de móviles o cualquier otra cosa a convertirse en lugares de despacho de alcohol y bocadillos, incentivando el botellón y contribuyendo al aumento de la basura en la calle, un mal asunto si hablamos de imagen de ciudad y de destino turístico", denuncian.

"Los y las hosteleras cumplen con toda la normativa sean o no fiestas, una normativa exigente que no se aplica a los locales con 'licencias exprés', que compiten con la hostelería tradicional de forma desleal", han indicado.  

Debate en redes sociales

El enfado de hosteleros por la proliferación del botellón en las fiestas ha suscitado numerosos comentarios en las redes sociales de este periódico, desde quienes apoyan las reivindicaciones del sector a quienes critican los "elevados precios" que obligan a buscar alternativas. "En gran medida, razón no les falta. Por otro lado, que te cobren 6 euros por dos Coca-colas en vaso de plástico también fomenta que muchos vayamos a los fuegos con las latas y los bocatas de casa", opina Aitor en la plataforma Facebook. "Si la hostelería de Pamplona tuviese unos precios razonables la gente compraría menos en esas tiendas... Pero como tenéis unos precios desorbitados la gente se va a lo más barato", expresa Javi Aldabe en la misma red social.

Por otro lado, Esther Fernández, otra usuaria de Facebook, se queja de que en tiendas de chucherías, donde entran niñas y niños, se venda alcohol: "En las cafeterías no dejan ni siquiera cerveza o vino, y en la de chuches, ginebra, whisky, ron, cervezas, kalimotxo...".

Para Félix Goikotxeta "hay mucho de qué hablar": "Los precios abusivos lo primero. La aglomeración de gente lo segundo. Pregunto a la hostelería: ¿seríais capaces de atender a toda la gente que acude el fin de semana? ¿Creéis que la gente que acude a San Fermín está para esperar una hora, y hora y media, para una caña en un vaso de plástico que por lo blando que es y lo fuerte que lo tienes que agarrar no llega a la puerta? ¿Y los katxis lo mismo? Tercero, los baños. Si cobráis semejantes precios tendréis que tener unos baños vigilados y limpios. ¿O es que al haber tanta gente en los bares no da para tanto, en cuanto a limpieza e higiene? Yo creo que la gente bebe y compra en otros establecimientos porque es imposible según a qué horas entrar en los bares por los precios y por la cantidad de gente. ¿Queréis que nos pongamos unos encima de otros hasta llegar al techo? Si queréis publicitar San Fermín y que la gente venga y consuma sois vosotros los que tenéis que buscar la solución...".

David Montero: "Esto ya empezó hace unos años... Es tan comprensible lo de los hosteleros como lo de los clientes, no va a ningún lado el tema, ya que se ha implantado y seguirá así... Está muy feo subir los precios en Sanfermines y ofrecer peor servicio y en plástico... Pero también está feo que una tienda de móviles ponga una barra en fiestas y venda bebidas... Yo por ejemplo, almorcé en San Juan y por un katxi de cerveza me cobraron 5 euros y en Estafeta 8 euros. Tampoco me parece tan caro, pero sí es grande la diferencia...".

Noelia Azparren: "Toda la mierda que se ve en las calles es de esas tiendas exprés, y de la gente, no del bar. Al bar le caen inspecciones de Sanidad, de Trabajo, etc. Eso en San Fermín, y si no, les multan. ¿Y las inspecciones de Sanidad a esos locales? Porque yo he visto hacer bocatas sin ningún tipo de higiene...".

Mieltxo, en la red X, antigua Twitter, considera que "el sector de la hostelería es insaciable, y más en Sanfermines. Algunas calles de lo Viejo son prohibitivas, pero siempre hay honrosas excepciones de hosteleros sensibilizados con el cliente de toda la vida y con los vecinos de lo Viejo. Es fácil saber qué bares son".