pamplona. Las obras de continuación de la Autovía del Pirineo una vez que traspasan la muga navarra, se hallan a día de hoy paralizadas por completo. La empresa adjudicataria del tramo que enlaza Tiermas (Aragón) con el límite de provincia de Navarra, la leonesa Teconsa, se ha tenido que acoger a una situación de concurso de acreedores por impagos. La firma Tecnología de la Construcción, del grupo Martínez Núñez y que va a presentar un ERE para 460 de sus 635 trabajadores al tener una deuda de 204 millones de euros, había comenzado los trabajos de desbroce y movimiento de tierras en los 4,3 kilómetros que discurren a orillas del embalse de Yesa. El Estado le adjudicó las obras en junio de 2008 a Teconsa por 23,8 millones, con un plazo de ejecución de 17 meses por lo que deberían finalizarse en enero de 2010, pero lógicamente el nuevo escenario de la contratista va a retrasar al menos dos años las obras. Ahora, el contrato con Teconsa debe ser resuelto y el proyecto se licitará otra vez públicamente a otra empresa.

Lo curioso del caso es que el nombre de esta constructora no sólo ha aparecido en los últimos días en las portadas con motivo de su situación de quiebra, sino que también se le está investigando por los contratos que consiguió a través de la llamada trama Gürtel. De hecho, a Teconsa se le adjudicó la infraestructura sonora de la visita que realizó el papa Benedicto XVI a Valencia y cuyo cometido se encargó a Correa y compañía. También el nombre de la firma aparece en varias grabaciones ligado a varios contratos con apariencia de tratos de favor y obtenidos a partir de los cabecillas de la misma trama. Y ahí no acaba todo. Incluso el PP utilizó Teconsa para atacar al Gobierno. Los populares denunciaron que el Ejecutivo de Zapatero desde 2004 ha cerrado negocios con esta constructora por valor de 300 millones de euros, 45 durante 2009, entre ellos los 23,8 del primer tramo aragonés de la Autovía a Jaca.