pamplona - La Confederación Católica de Padres (Concapa) en Navarra, que este pasado lunes interpuso un recurso contra el programa de coeducación Skolae, del departamento foral de Educación, reiteró ayer su “absoluto rechazo a la imposición” de esta iniciativa y reclamó la “paralización” de su obligatoriedad “en la red pública y en la concertada”. Esta entidad de apymas, mayoritaria en la concertada, afirmó que no descarta emprender o apoyar nuevas acciones, “ante el evidente malestar de las familias con alumnado en edad escolar, a la vista de los materiales que se han conocido, la absoluta desorientación de la Consejería, diciendo cada día una cosa diferente, y el ataque a la libertad educativa”. Esta postura se suma a la barajada por familias de dos centros concertados, que anunciaron recientemente que querían presentar un recurso ante la Justicia para frenar la aplicación del programa.

Por su parte, Concapa, que ya formuló en su día alegaciones contra el decreto de salud sexual y reproductiva, llamó al profesorado a que “no ceda ante el chantaje al que están siendo sometidos y se niegue a acudir a los cursos de formación si es que entienden que atentan contra su libertad, principios éticos o religiosos”. Asimismo, llamó a personas, agrupaciones y asociaciones, “cualesquiera que sean sus ideas o creencias”, a exigir que se respete la libertad de educar conforme a las propias convicciones.

rechazan skolae En una nota, la Confederación expresó su “absoluto rechazo a la imposición del programa Skolae, tanto en los colegios concertados como en los públicos, puesto que corresponde a las familias educar a sus hijos en estos aspectos conforme a sus creencias, con arreglo a lo dispuesto en la Constitución”.

En opinión de la organización, el Gobierno foral “trata de dar la impresión de que el contenido del programa Skolae viene impuesto por alguna ley”, cuando “su puesta en marcha se ha realizado únicamente mediante resoluciones del Director General de Educación”. “De esta manera, el Gobierno de Navarra ha burlado todos los mecanismos de transparencia y control parlamentarios y los foros de participación de la comunidad educativa”, sostuvo.

Concapa exigió a la consejera de Educación, María Solana, que “explique a las familias por qué continúa la imposición de un programa ideológico que vulnera gravemente la libertad de educación”. Asimismo, exigió a la consejera, el Gobierno, el Parlamento foral y los partidos que “no conviertan los derechos de las familias en un problema político”. - D.N.