Francia ha sacrificado cerca de dos millones de animales para tratar de poner freno a los brotes de gripe aviar que desde noviembre se han ido propagando sobre todo por las Landas y los Pirineos Atlánticos, lo que está diezmando en particular las explotaciones de patos.

La cifra la dio este lunes el ministro de Agricultura, Julien Denormandie, en una entrevista en la emisora France Info en la que señaló que hay ocho departamentos en los que se han identificado diferentes focos en granjas.

Según explicó su departamento en un comunicado, el grueso de esos focos (386) están localizados en siete departamentos del suroeste: Landas, Pirineos Atlánticos, Gers, Lot-et-Garonne, Hautes Pyrénées, Haute Garonne y Tarn-et-Garonne.

En Iparralde se tiene constancia de varios casos de gripe aviar en dos criaderos de Biduze, que ha llevado a matar a centenares de miles de aves, principalmente en el departamento de Landas, desde que hiciera su aparición en otoño.

Más al norte hay otros doce en el departamento de Vendée, en la fachada atlántica. Y también se tiene constancia de once casos de gripe aviar en la fauna salvaje en diferentes puntos de Francia.

Frente a un virus "extremadamente contagioso", la regla que se aplica es el sacrificio de todas las aves en las explotaciones que se encuentran en un radio de cinco kilómetros de cualquier foco. Además, están prohibidos los movimientos de los animales en un radio de 20 kilómetros.