Ochocientos docentes de Navarra han firmado un manifiesto en el que exigen el alto el fuego en Gaza y muestran su "más absoluta repulsa" a la destrucción de todas las infraestructuras educativas. “Docentes por el alto el fuego” (DAF-SEI), como se denomina la agrupación, quiere denunciar “en los términos más contundentes la violación sistemática del Derecho Internacional Humanitario que Israel está llevando a cabo sobre la Franja de Gaza” y exige el alto al fuego en este territorio convertido en “objetivo militar”.

Advierten que “a día de hoy, 93 centros educativos, entre escuelas y universidades, han sido completamente arrasados y 292, parcialmente dañados”.

Además, el grupo convoca concentraciones todos los jueves a la hora del recreo en los centros educativos, llama a la comunidad docente a la firma del manifiesto y a unirse al bloque del profesorado en la manifestación que tendrá lugar el próximo sábado 20 de enero a las 17 horas en Pamplona desde Antoniutti. Esta manifestación, convocada en todo el estado español, pide el fin del genocidio e insta al Gobierno español a poner fin a la venta de armas y a las relaciones con Israel.

Este es el manifiesto completo

Según Euro-Med Human Rights Monitor, desde el pasado octubre hasta el 4 de enero, 30.676 personas han sido asesinadas en los territorios palestinos ocupados y el número de heridas supera ya los 59.000. De ellas, el 75 % son mujeres, niños y niñas.

Desde el colectivo de docentes que firma este manifiesto, rechazamos y denunciamos en los términos más contundentes, la violación sistemática del Derecho Internacional Humanitario que Israel está llevando a cabo sobre la Franja de Gaza, así como en el resto de los territorios ilegalmente ocupados desde 1967: Cisjordania y Jerusalén Oriental. 

Además, desde el ámbito educativo, mostramos nuestra más absoluta repulsa a la destrucción de todas las infraestructuras educativas, desde Universidades e institutos, a guarderías y colegios; incluidos algunos de las Naciones Unidas. Asimismo, se ha producido una redada selectiva sobre profesores y decanos bien, en forma de asesinato o de secuestro. Esta destrucción planificada e intencionada del sistema educativo en Gaza ha dejado a más de 625.000 estudiantes sin la posibilidad de volver a sus clases, convirtiéndolos, por primera vez en la historia moderna, en objetivo militar. 

Consideramos que no podemos ni debemos mirar hacia otro lado, como seres humanos. Además, como docentes, tenemos la obligación moral de apoyar a nuestros colegas, profesores y profesoras, maestros y maestras que están siendo atacados sin justificación alguna con el único objetivo de dejar sin educación a los jóvenes gazatíes. Los datos hablan por sí mismos. A día de hoy, 93 centros educativos, entre escuelas y universidades, han sido completamente arrasadas y 292 parcialmente dañadas. La sistemática destrucción del sistema educativo resulta evidente. Y nosotros y nosotras sabemos, como ya decía Nelson Mandela que: “Sólo la educación de las masas puede liberar al pueblo. Una persona educada no puede ser oprimida, si es capaz de pensar por sí misma”.

Por tanto, exigimos un alto al fuego inmediato y duradero en la Franja de Gaza y el fin del genocidio en Palestina, definido así por el Alto Comisionado para los Derechos Humanos de la ONU. Pedimos, además, una actuación inmediata que asegure la protección de la población civil, que permita la entrada de ayuda humanitaria y que asegure el respeto a los derechos humanos en todos los territorios palestinos ocupados.