Nieves Basterra Erdozáin todavía se fatiga mucho a poco que haga algún esfuerzo o camine más de la cuenta. Va a hacer tres años desde la última sesión de radioterapia que recibió, pero algunas secuelas que los tratamientos que recibió para eliminar el carcinoma de pulmón que le detectaron en 2019 aún perduran años después. “Algunos tratamientos son muy discapacitantes”, reconoce Nieves, que tras recibir quimioterapia, radioterapia e inmunoterapia lleva casi tres años sin recibir ningún tratamiento, con revisiones periódicas: “Hasta que no pasan los 5 años del último tratamiento no estás libre de la enfermedad.Pero bueno, de lo que se trata es de ir cronificando la enfermedad”.

Este martes participó en el acto que la Asociación Española Contra el Cáncer (AECC) en Navarra organizó en el Colegio de Médicos con motivo del día mundial de esta enfermedad y, aunque reconoció sentirse algo fatigada, aseguró encontrarse “muy bien”. Nieves participó, junto a varios investigadores navarros, en una mesa redonda sobre los nuevos tratamientos contra el cáncer y la importancia que éstos tienen para los pacientes, en la que destacó como objetivo prioritario el aumento de la supervivencia al cáncer, pero apuntó a la mejora de la calidad de vida como uno de los retos que tiene por delante la investigación.

Lo primero que te viene a la cabeza cuando piensas en investigación en cáncer es aumentar la supervivencia, que podamos vivir más. Pero conforme vayamos consiguiendo eso hay que tratar de avanzar en los tratamientos para que los pacientes sufran las menos secuelas posibles. Al final la investigación es crucial para mejorar nuestra calidad de vida”, señaló esta vecina de Pamplona de 55 años.

Porque no solo se trata de vivir más tiempo, sino de vivirlos mejor. Y es que a la fatiga que todavía arrastra Nieves se suelen sumar otra serie de secuelas que dejan los tratamientos como el mayor riesgo de sufrir cardiopatías, problemas de fertilidad, dolores de cabeza o problemas de Salud Mental, que pueden llegar a afectar muy negativamente a la vida diaria de los pacientes, sobre todo si se han recibido varios tratamientos distintos.

En el caso de nieves, tras su diagnóstico a finales de 2019 tuvo que hacer frente a varias sesiones de quimioterapia, radioterapia e inmunoterapia. “A los dos años tuve una recidiva –reaparición del cáncer– y volví a ser tratada con radioterapia, porque no era un tumor que se pudiese operar. En 2022 me dieron el último tratamiento y desde entonces estoy con revisiones”, relató.

Agradecimiento

Aunque queda camino por recorrer, Nieves reconoce que los tratamientos ya se están mejorando mucho en los últimos años, “se está consiguiendo que los efectos secundarios sean menos discapacitantes”, apuntó, y quiso agradecer el trabajo y el esfuerzo que realizan día a día los profesionales: “Hoy –en referencia a este martes, Día Mundial Contra el Cáncer– como paciente quiero mandar un mensaje de agradecimiento a todos los investigadores que dedican su tiempo y esfuerzo para encontrar nuevos y mejores tratamientos. También quiero trasladarles un mensaje de ánimo, para que sigan con la investigación y un mensaje de esperanza, para que tengan resultados positivos con sus proyectos”.

“Por último, a los medios de comunicación les pediría que sigan divulgando la necesidad de invertir en investigación y concienciando a la sociedad y a las instituciones, porque para esto, para la ciencia, hace falta invertir dinero”, sentenció Nieves.