Las diligencias que obran en el Juzgado de Instrucción número 3 de Pamplona no recogen actuaciones contra la Corporación municipal del principal encausado por los incidentes de la calle Curia, ocurrido el pasado 7 de julio. Además, un informe policial sobre un vídeo de los hechos, así como la propia declaración del agente municipal que resultó gravemente lesionado en la nariz durante los altercados, omiten el fuerte puñetazo que el propio policía propinó previamente a otro mozo.

Las actuaciones obrantes en el juzgado que investiga los incidentes ocurridos tras la procesión de los últimos Sanfermines no contemplan ninguna actuación de E.C.E. que pueda sustentar la imputación por un delito de odio que pesa sobre él. Transcurridos más de tres meses desde que sucedieron los hechos, los resultados de las investigaciones que llevan a cabo la Policía Municipal de Pamplona y la Policía Nacional no parecen apuntar en esa dirección.

En las diligencias ampliatorias remitidas tras el atestado inicial, que supuso el ingreso provisional en prisión de E.C.E., quien pudo salir de la cárcel días después al estimarse su recurso, sí queda de manifiesto que el policía municipal que sufrió lesiones graves en la nariz acometió previamente contra el público después de que se le derramase encima el líquido del vaso de un mozo, si bien se oculta el puñetazo que propinó a esta persona.

Declaración del agente

La declaración realizada por la víctima de la agresión en sede policial e incluida en la causa judicial recoge que tenía asignada la protección de una conceja de UPN (María Barberena) y que su cometido “era evitar que fuera agredida”. “Un grupo de personas arrojan un vaso con líquido que le impactó en la cabeza, por lo que se volvió para ver qué persona lo estaba tirando y extendió su brazo para intentar sujetarlo e identificarlo”, hizo constar ante los investigadores.

Sin embargo, en un vídeo difundido por DIARIO DE NOTICIAS, y que consta en las actuaciones, se aprecia con nitidez como el policía municipal, lejos de extender su brazo para sujetar o identificar a la persona que supuestamente le había arrojado un vaso con líquido, como él mismo declaró, le dio un puñetazo en la cara.

Análisis policial del vídeo

En el análisis del citado vídeo, aportado ya a la jueza instructora, se constata que los hechos se inician cuando el joven que portaba el vaso con líquido fue empujado, lo que provocó que este se derramase “sobre los componentes de la Corporación”. En ningún caso, el vaso es arrojado contra la cabeza del agente, sino que es el líquido, supuestamente cerveza, el que le cae encima en medio del tumulto. 

Secuencia de la agresión en la Calle Curia el 7 de Julio

Secuencia de la agresión en la Calle Curia el 7 de Julio

En la interpretación del vídeo, los investigadores aseguran que el policía municipal “instintivamente se vuelve hacia el lugar de donde recibe el impacto, intentando alcanzar con su brazo derecho” al varón que llevaba el vaso en la mano. En este informe, se omite, al igual que ocurre en la declaración realizada por el propio agente, que en realidad propinó un fuerte puñetazo en la cara del citado mozo, como queda demostrado en el mismo vídeo analizado y difundido por DIARIO DE NOTICIAS.

En el estudio de la grabación aportada al juzgado, sí queda acreditado que E.C.E. alza su brazo derecho “con el puño cerrado”, el cual “desciende bruscamente hacia donde se encuentra la cabeza del policía municipal”, al que golpea, causándole lesiones graves en la nariz. Estos hechos sí soportarían la imputación de un delito de lesiones graves y un delito de atentado a agente de la autoridad, pero no un delito de odio.