- La jefa del servicio de Microbiología Clínica del CHN, Carmen Ezpeleta, consideró ayer que las variantes de la covid-19 “pueden tener impacto en la salud pública a través del incremento de la transmisibilidad, aumento en la gravedad de la infección y escape a la respuesta inmune adquirida tras una infección natural o generada por algunas vacunas”. En este sentido, Ezpeleta apuntó que la secuenciación “nos permitirá conocer los linajes del virus que circulan en Navarra y las variantes que circulan en nuestro medio. Lo esperable es que en la primera y segunda oleada predomine la cepa B.1.177, que es un virus existente en Europa cuyo origen es español. A partir de la tercera ola, poco a poco, va predominando la cepa británica, la B.1.1.7”.

Por su parte, la consejera de Salud, Santos Induráin, resaltó el componente transversal de colaboración que subyace en este proceso, que se enmarca dentro de una “apuesta estratégica y decidida por un sistema integral y potente de detección de la covid-19”. En este sentido, Induráin recordó que el CHN fue uno de los primeros hospitales, fuera del ámbito de las grandes capitales, que pudo realizar PCR en su propia red hospitalaria y que ha permitido desplegar un gran dispositivo de detección. “El centro de secuenciación refuerza así esta apuesta, cerrando un círculo iniciado hace un año y abriendo hacia el futuro muchas potencialidades de la Comunidad Foral en lo que a colaboración con otras autonomías se refiere, en éste y otros campos”, defendió la consejera. .