El escritor pamplonés Patxi Irurzun acaba de publicar Lacha. Los tímidos siempre tenemos frío con el sello navarro Alkibla. Se trata de un ensayo en el que el autor reflexiona sobre la timidez y lo que esta ha generado en su vida. También charla con introvertidos como el músico Diego Vasallo y menciona a otros célebres como Agatha Christie, Angus Young, Gorka Urbizu o Jorge Luis Borges. De hecho, el argentino ocupa la portada de este libro, que, como acostumbra a hacer la editorial, está muy cuidado desde el punto de vista gráfico y contiene varias imágenes del fotógrafo siciliano Ferdinando Scianna, lo que, sin duda, lo hace más especial. El volumen ya está a la venta en librerías y en el puesto que Alkibla tiene hasta el domingo en El Bosquecillo dentro de la Feria de la Edición de Navarra. 

“Hacía tiempo que quería escribir o reflexionar sobre esto, porque si hay un rasgo de mi carácter que me define es, sin duda, la timidez. Ha determinado todo lo que hago, pero, sobre todo, lo que he dejado de hacer; las oportunidades que he dejado pasar, la forma de relacionarme con la gente; evitar ir a algunos sitios o hacer algunas cosas...”, comenta Irurzun, que reconoce el “sufrimiento” que le ha causado esta condición. “A todos en algún momento nos da vergüenza algo, pero los tímidos enfermizos como yo sentimos vergüenza en todo momento y esto se hace una carga muy pesada”, agrega.

Portada de 'Lacha', con una imagen de Borges tomada por Scianna.

Portada de 'Lacha', con una imagen de Borges tomada por Scianna. Alkibla

No es la primera ocasión en la que el escritor aborda la cuestión. “Por ejemplo, hace poco he releído Atrapados en el paraíso, que me lo acaban de traducir al esloveno, y veo que hago alusiones a la inseguridad que me hace sentir mi carácter”, pero lo que de verdad “determinó que me pusiera a escribir sobre ello fue un poema de Diego Vasallo que leí casi por casualidad y que habla de cómo la sensatez del tímido paraliza la vida”. Por otra parte, ese texto también hablaba de la audacia del tímido, “y me sentí representado”.

Más adelante, Irurzun entrevistó al músico donostiarra, y aquel encuentro “terminó de darme las claves principales del libro”. El “último empujón” se lo dieron Carolina Martínez y Clemente Bernad, de Alkibla, que le invitaron a participar en la colección Emergencias, donde los autores y las autoras “escribimos sobre nuestros dilemas, nuestras contradicciones, y me pareció que me venía como anillo al dedo”.

100 pesetas menos

En este volumen, el escritor narra de manera desenfadada varias anécdotas de su vida en las que la timidez le ha ganado la partida. Como, por ejemplo, cuando, siendo niño, su madre le ofreció 100 pesetas si iba a hacer la compra, “pero me quedé sin ellas porque me daba vergüenza pedir la vez o que las señoras se me colaran”, confiesa. En ese sentido, Lacha es una mezcla de ensayo y de libro de memorias “divertido”. Porque, a pesar de los “padecimientos” que la timidez le ha hecho pasar, Irurzun siempre ha usado el humor como coraza y, además, admite que algunos comportamientos de los introvertidos “tienen un punto cómico”. “Al estilo del personaje, torpe y patoso, de Peter Sellers en El guateque”, apunta. “Eso a veces suele generar un sentimiento de simpatía en los demás del que uno aprende a beneficiarse con el tiempo”, admite. Por el contrario, “también hay gente que se aprovecha porque sabe que no eres capaz de negarte a algunas cosas”.

“La timidez ha determinado lo que hago, pero, sobre todo, lo que dejo de hacer”

Patxi Irurzun - Escritor

Lógicamente, Patxi Irurzun no es como cuando tenía 10 años, más que nada porque, al final, “asumes que eres tímido y aprendes a sobrellevarlo”. Y más cuando, como él, se expone cada vez que publica un libro y le toca hablar en público para presentarlo. En el caso de este volumen, lo curioso es que Ferdinando Scianna “tiene un carácter completamente opuesto al mío”. “Por lo que me han contado Carolina y Clemente, debe de ser súper extrovertido, expansivo, aunque sus fotos no invaden”, indica. 

Sin embargo, lejos de lo que pudiera parecer, escribir y publicar “ha sido para mí una forma de socializar y de compensar algunas carencias”. Y es que, como también menciona en Lacha, coincide que en el mundo de las artes hay muchas personas tímidas, que no cobardes. Es más, “como nos contenemos tanto, tenemos mucha agitación dentro y cuando explotamos, nos desbordamos y la gente de alrededor se sorprende mucho”.

Y es que ser introvertido no es ser pusilánime, defiende Irurzun, que en este punto hace mención al neologismo en euskera acuñado por el músico Gorka Urbizu. “Me gusta porque él dice que es apalharro, que viene a ser humilde y orgulloso a la vez”. Aunque si una frase define al escritor navarro es la que del bertsolari Andoni Egaña, con la que abre el libro: “Tímido, valiente, contradictorio”.