El proyecto Navarra 360º busca la participación de 200 agricultores y ganaderos de la Comunidad Foral en implantar un modelo que favorezca la agricultura regenerativa.

Esta iniciativa parte de EIT Food, organismo europeo innovador en el sector agroalimentario, que ha respondido a la necesidad de Danone que quería disponer de avena producida mediante un sistema regenerativo.

Hace un año EIT Food presentó la idea al departamento de Desarrollo Rural y Medio Ambiente del Gobierno foral, que la consideró interesante.

El proyecto, de colaboración público-privada, tendrá una duración de tres años y pretende la participación de estos 200 profesionales del sector primario, que tendrán un incentivo de cien euros por hectárea que sometan a estas investigaciones.

El coste total de Navarra 360º supondrá 3,2 millones de euros, de los que la mitad aportará la industria participante para abonar las cantidades anteriormente indicadas a los agricultores y ganaderos. Los participantes no tienen que poner a disposición del proyecto toda su superficie, sino una parte.

Otros agentes que van a formar parte de esta iniciativa son Danone, Cargill, Intermalta e INTIA.

Reunión de todos los agentes que participan en el proyecto Navarra 360º. Iban Aguinaga

Todos los actores se han reunido este lunes en Pamplona para poner en marcha Navarra 360º. En un principio, la primera jornada estaba prevista en febrero, pero debido a las tractoradas realizadas durante estos meses se pospuso su puesta en marcha.

El consejero de Desarrollo Rural y Medio Ambiente, José María Aierdi, ha destacado que "la transición a otro modelo requiere de esfuerzo, en el marco de un sector primario competitivo que sea respetuoso con el medio ambiente".

¿Qué es la agricultura regenerativa?

Melissa Comellas, responsable de agricultura regenerativa en EIT Food y también de Navarra 360º, ha destacado que este método "reduce las emisiones, favorece la biodiversidad, convierte al suelo en el principal protagonista y mejora la rentabilidad de las explotaciones al cabo de unos años".

Desde 2020 trabajan en este proyecto, que ahora aterriza en la Comunidad Foral. En estos cuatro años han llegado a 30.000 hectáreas en Europea, y a entre 2.000 y 3.000 agricultores.

Comellas ha remarcado la importancia de impulsar este sistema para afrontar "el estancamiento de la productividad de la tierra, el aumento de los costos de producción, la baja rentabilidad, las presiones del mercado global, la desertificación y la degradación del medio ambiente y los recursos naturales".

Este proyecto permitirá el estudio de 60 parámetros. Entre los resultados esperados, se apunta a una reducción del 20% en el uso de fitosanitarios y del 40% en la fertilización mineral. Habrá también una rotación de cultivos de trigo, cebada, avena y colza.

Durante el proyecto, se analizarán los costes que suponen para los agricultores y se explorarán nuevos mecanismos de financiación. “Los agricultores son la base del proyecto: su implicación es la clave de todo”, ha resaltado Comellas. “Cada actividad está pensada en ellos, en que les pueda ayudar en su transición y está alineada con los valores que queremos transmitir”.

Una vez que termine, en 2026, se confía en replicar el modelo en otros lugares de Europa.

Varios bloques

Comellas ha detallado que el trabajo se divide en varios bloques: apoyo al agricultor mediante cursos -dos al año- y asesoramientos individuales o colectivos; respaldo financiero al agricultor -cien euros por hectárea-; comunicación y transferencia de conocimiento; testeo en las fincas piloto; recogida de datos a través de entre 80 y 90 indicadores; y monitorizar el suelo, la biodiversidad y la gestión del agua. "La agricultura regenerativa se basa en la mejora continua", ha repetido.

EIT Food ha contactado con Caja Rural para hablar sobre la cuestión financiera, aunque los bancos no están todavía enfocados en la descarbonización del sector primario sino que están preparados para actividades como la energía, la minería y el transporte. "Vamos a seguir hablando con esta cooperativa de crédito para ver cómo podemos apoyar al agro", ha indicado.

Otros participantes

Durante la jornada también han intervenido INTIA, Danone Ecosystem, Cargill e Intermalta, socios del proyecto.

Finalmente, han explicado su participación en Navarra 360º Grupo AN, cooperativa agroalimentaria y de la economía social con sede en Tajonar, y Harivenasa, que produce y comercializa en Etxarren productos derivados de la avena en diferentes formatos (copos, salvado o harina) así como otros cereales.